La UE exige a Sánchez acelerar la detección de las cepas supercontagiosas: el riesgo es «muy alto»
El Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades (ECDC), organismo de referencia para el coronavirus, ha realizado un análisis sobre el nivel de detección de las nuevas cepas en los países de la Unión Europea. La conclusión es que «en la mayoría de Estados miembros, la capacidad de secuenciación para la identificación de las cepas está por debajo de la recomendación de la Comisión Europea», que es de entre el 5 y el 10% de los casos.
El aviso va dirigido a aquellos países que, como España, secuencian a un nivel inferior a las recomendaciones europeas. Así lo admite el propio Ministerio de Sanidad en el protocolo ‘Integración de la Secuenciación Genómica en la Vigilancia del SARS-CoV-2’, publicado el pasado 21 de enero, justo cuando la UE realizaba este estudio.
En ese documento, Sanidad destaca la importancia de hacer un seguimiento de las nuevas mutaciones del Covid «que aumenten la transmisibilidad del virus, su virulencia o que escapen a la acción de los anticuerpos neutralizantes generados tras la infección natural o la vacuna», avisando de que «las variantes constituyen un problema de salud pública de primer orden que puede repercutir de forma importante en el control de la pandemia».
Sin embargo, se reconoce al mismo tiempo que el nivel de secuenciación es inferior al recomendado por las autoridades comunitarias.
«El 19 de enero la Comisión Europea publicó un comunicado instando a los países a incrementar la tasa de secuenciación ya que consideran que la actual no es suficiente para identificar la progresión de las variantes o detectar nuevas. Plantean que los Estados Miembros deben alcanzar la capacidad de secuenciar al menos el 5%, y preferiblemente el 10%, de los resultados positivos de las pruebas de Covid-19, minimizar los retrasos en los resultados y garantizar que estos datos se comparten de forma comparable», recoge el Ministerio. Más adelante, admite: «Aunque el objetivo es que de forma progresiva se llegue a los porcentajes de secuenciación propuestos por la Comisión Europea, en este momento se propone analizar un número de muestras que se sitúen alrededor del 1-2% de los casos diagnosticados en cada comunidad autónoma, que deberán ir incrementándose según las capacidades de cada comunidad».
En otro momento se reconoce también que la Red de laboratorios para la identificación y seguimiento de las cepas circulantes en nuestro país «se encuentra todavía en desarrollo».
En sus medidas para luchar contra la propagación del virus, la Comisión Europea instaba a los países a «aumentar urgentemente la secuenciación del genoma al menos al 5%—y, preferiblemente, al 10%— de los resultados positivos de las pruebas». El organismo europeo avisaba de que «muchos Estados miembros están efectuando pruebas en menos del 1%», lo que «no es suficiente para identificar la progresión de las variantes o detectar otras nuevas».
«Riesgo muy alto»
Ahora, el ECDC avisa de que el riesgo de introducción y propagación comunitaria de las nuevas cepas ha aumentado a «alta o muy alta». Por ello, pide a los países «que redoblen sus esfuerzos para detectar introducciones de variantes conocidas y la aparición de nuevas mutaciones aumentando el nivel de vigilancia y secuenciación». Señala asimismo que para llegar a la recomendación marcada por la Comisión Europea es «necesario que haya un aumento significativo de la capacidad de secuenciación de los Estados miembros».
Según la encuesta realizada entre países -a 22 de enero-, tres de ellos informaron de una tasa de secuenciación superior al 10%; otros dos, se quedaron en el 5% y «ninguno de los países restantes alcanzó la proporción recomendada». El ECDC se ha ofrecido a ayudar a los países con baja capacidad de secuenciación.
En España se han detectado ya las tres cepas más preocupantes en la actualidad. La variante británica, asociada a una mayor capacidad de transmisión, es la que tiene más presencia. Según publicó OKDIARIO, nuestro país está a la cabeza mundial de propagación. Además de los casos confirmados -más de medio millar- existen multitud en estudio. En la Comunidad de Madrid, según los últimos datos, los casos de la mutación de origen inglés alcanzan ya una media del 25%.
«Más letal»
El Ministerio de Sanidad ha admitido ya que existe «una posibilidad real» de que la variante británica, presente ya en 14 comunidades, pueda ser más grave y letal y ha advertido de que podría aparejar un aumento de la incidencia y, con ella, de las hospitalizaciones y la letalidad «en las próximas semanas».
Así consta en la última actualización del documento ‘Circulación de VOC 202012/01 (B.1.1.7) y otras variantes de SARS-CoV-2 de interés para la salud pública en España’, en la que recuerda que la británica está asociada a una mayor capacidad del virus para transmitirse, «lo que puede asociarse a mayor incidencia de la enfermedad en los lugares donde circule ampliamente y no se apliquen estrictamente las medidas de prevención».
«Existe una posibilidad real de que pueda estar relacionada con mayor gravedad y mayor letalidad. El riesgo de que se produzca un aumento progresivo en las hospitalizaciones asociado a la circulación cada vez mayor de la variante es por tanto elevado, tanto por el aumento de la incidencia como por el aumento de la gravedad», se recoge en el documento.