El PP y Vox cargan contra la ley de amnistía a cambio de los «siete votos» de Junts: «Una humillación»
Ambas formaciones auguran una lenta "agonía" al Gobierno de Sánchez
Proponen dos enmiendas a la norma: "Es lo que hacen las democracias modernas cuando están en peligro"
Los dos partidos de la oposición, PP y Vox, han defendido sus enmiendas a la totalidad a la Ley de Amnistía en el pleno del Congreso de los Diputados. Durante la sesión de este miércoles, ambas formaciones han criticado al PSOE como el impulsor de la norma por «siete votos». La oposición hacía referencia a las cesiones que ha tenido que hacer el Gobierno para conseguir el apoyo de Junts para la investidura de Pedro Sánchez.
Tanto la formación que lidera Alberto Nuñez Feijóo como la que encabeza Santiago Abascal han augurado que el Ejecutivo va a vivir una lenta «agonía». Todo ello a pesar de que, finalmente, el partido de Carles Puigdemont se decantara por no votar y permitir así la aprobación de dos de los tres decretos del Gobierno que se convalidaban en la Cámara Baja este miércoles.
En la sesión también se ha discutido las enmiendas a la totalidad que han propuesto PP y Vox. En sus proposiciones, ambas formaciones han propuesto reformar el Código Penal e incluso disolver partidos que se enfrenten a la Constitución, declaren la independencia o convoquen referéndums ilegales.
La amnistía, una «humillación»
Cuca Gamarra, la secretaria general del PP, ha etiquetado de «humillación» la actitud del PSOE frente a sus socios independentistas. La que fuera portavoz del Congreso de los populares ha defendido que es necesario de tipificar la deslealtad constitucional como delito. «Es lo que hacen las democracias modernas cuando están en peligro», ha declarado Gamarra desde la tribuna de oradores del Senado, lugar en el que se celebraba hoy el pleno por imposibilidad de hacerlo en la Cámara Baja.
La dirigente del Partido Popular ha descrito su propuesta para modificar el Código Penal como una «oportunidad política y solidez jurídica». Además, Gamarra ha atacado la Ley de Amnistía que proponía modificar diciendo que, con esta concesión, el Gobierno ha conseguido «exclusivamente por siete votos».
«Causa bochorno lo que han aceptado y no tengan ninguna duda de que esto lo arrastrarán durante décadas. Ahora la indignidad de un político abre las puertas a que todos aquellos que quieren romper nuestro orden constitucional sean los que condicionan el futuro de nuestro país y que traten además de derrotar a los demócratas», ha dicho Cuca Gamarra.
La secretaria general del PP ha puntualizado que el artículo 155 de la Constitución «no puede ser el último recurso ante las amenazas separatistas» y ha recordado que el Código Penal ya prevé la disolución de personas jurídicas si cometen determinados delitos, por lo que no es extraordinario que si se atenta contra el orden constitucional también se puedan disolver o suspender a instancia de los jueces.
«Reprobación del Gobierno»
La portavoz de Vox en el Congreso de los Diputados, Pepa Millán, ha descrito su enmienda a la totalidad como «una reprobación del Gobierno en su conjunto». La representante de Vox ha criticado la «ambición» de Pedro Sánchez, quien la política cordobesa considera que ha demostrado su necesidad de «seguir atornillado» al poder. Además, la representante del partido de Abascal ha manifestado sarcásticamente que la norma debería llamarse «ley orgánica para hacer presidente a Sánchez a cambio de siete votos», ya que, según esta diputada, es el verdadero motivo por el que se tramita esta norma.
«Hay una mayoría de catalanes que respetan la ley y una minoría de golpistas y privilegiados. Han convertido a los primeros en ciudadanos de segunda para traer con honores de vuelta a los segundos», ha señalado.
La portavoz de Vox se ha dirigido al PP, a quien ha acusado de retroceder en su propuesta de ilegalizar los partidos separatistas como alternativa a la ley de amnistía. Ha descrito como una «lástima» que «cuando aciertan», desde Génova «miran a la izquierda para que le dé su visto bueno», y ha destacado que es el momento de «ejercer una oposición firme».