Así será la exhumación de Franco del Valle de los Caídos
Los trabajos de exhumación de Francisco Franco comenzarán a las 10.30 de la mañana del próximo jueves. El dispositivo está coordinado por Presidencia y Vicepresidencia y en él participan además la delegación del Gobierno Madrid, la Guardia Civil y la Policía Nacional. El Valle de los Caídos es demarcación de la Guardia Civil y el cementerio de Mingorrubio, de la Policía. Además, también participa Patrimonio Nacional, Patrimonio del Estado, la empresa funeraria, la secretaría de Estado de Comunicación y el grupo 45 del Ejército del Aire.
Los familiares
Estarán presentes 22 familiares de Franco, que serán recogidos en tres puntos diferentes de Madrid y conducidos allí “al objeto de evitar los problemas que puedan ocasionarse y garantizar la seguridad”, ha explicado La Moncloa.
El notario
La notaria mayor del Reino, la ministra de Justicia en funciones, Dolores Delgado, levantará acta y estará presente tanto durante el proceso de la exhumación como en el de la inhumación.
El forense
Todas las labores de la exhumación se realizarán en presencia de un forense.
Sin imágenes
No se permitirá ningún dispositivo móvil ni de captación de imágenes ni sonidos. Todas las personas que accedan al Valle de los Caídos pasarán por un detector de metales y un escáner, para evitar medios de captación.
Una carpa
Se colocará una carpa que rodeará el punto exacto en el que se encuentra la tumba de Franco. Esa carpa estará cubierta también por el techo, para evitar posibles cámaras. En estos días, la Guardia Civil realiza un ‘barrido’ para evitar cámaras escondidas.
Dentro de esa carpa estarán dos familiares. Uno de ellos, su nieto, Cristóbal. También la ministra de Justicia y alguna otra autoridad, además de los operarios, encargados de levantar la losa de 1.500 kilos. Moncloa prevé que participen unos 4 a 6 operarios.
Recubiertos de zinc
Moncloa ha informado de que la actual tumba de Francisco Franco está recubierta de hormigón y plomo, lo cual en principio evitaría que las corrientes subterráneas de la zona hubieran afectado a las condiciones del féretro. Los restos del dictador están recubiertos por una estructura sellada de zinc. No se conoce aún si el cuerpo de Franco está embalsamado o únicamente conservado.
El Gobierno considera que “lo más probable” es que el féretro de madera en el que se enterró al dictador, en 1975, se encuentre en un estado regular y, por tanto, sea necesario depositarlo en un nuevo ataúd.
La bendición
Una vez los restos se introduzcan en el nuevo ataúd (o se mantengan en el mismo, si estuviese en buen estado), el prior Cantera bendecirá los restos, a petición de la familia. En este acto no estará presente ningún monje benedictino.
El cortejo fúnebre
Será entonces cuando los familiares recojan el féretro y lo trasladen a hombros desde el altar mayor hasta el coche fúnebre, que estará en la explanada. Es un recorrido de unos 300 metros. El cortejo fúnebre estará compuesto por 22 familiares, únicamente.
Moncloa calcula que la operación puede tardar una hora, en el mejor de los casos, o hasta tres, si se complica.
Traslado en helicóptero
El plan A del Gobierno es trasladar los restos de Franco en helicóptero. Sin embargo, Moncloa teme las condiciones meteorológicas, y no será hasta el martes o miércoles cuando se decida el medio final, en base a las indicaciones del piloto.
Sin bandera
No habrá honores ni banderas en el féretro.
Acompañarán al féretro en el helicóptero el nieto del dictador, Francis Franco, la ministra de Justicia y “alguna otra autoridad del Estado”.
En Mingorrubio
Al panteón familiar accederán únicamente los 22 familiares junto con el prior Cantera.
El prior, y el sacerdote Antonio Tejero, cooficiarán una misa. Se trata, ha explicado Moncloa, de una petición de la familia inscrita en la “libertad de culto”.
Una vez en el panteón familiar, la familia sí podrá colocar símbolos o banderas.
El coste
El Gobierno no ha calculado aún el coste final de los trabajos para la exhumación y la inhumación de Franco, aunque sí ha fijado un máximo de 63.061,40 euros.
En campaña electoral
El Tribunal Supremo autorizó la exhumación de Franco el pasado 23 de septiembre. El 11 de octubre, el Consejo de Ministros aprobó un nuevo acuerdo de exhumación e inhumación en el que se establecía el paso de dos semanas para sacar los restos de Franco del Valle de los Caídos. El acuerdo establecía como límite el próximo 25 de octubre.
La exhumación se realiza en vísperas de la campaña electoral, y en una semana especialmente crítica para el Gobierno de Pedro Sánchez por los disturbios violentos en Cataluña. La Moncloa prevé que el acontecimiento eclipse las críticas por la inacción de Sánchez ante los altercados violentos de radicales separatistas.
El Ejecutivo socialista quiere convertir el proceso que, dice, se llevará a cabo “con absoluta dignidad y respeto”, en el principal argumento de la campaña para el próximo 10-N.