Día del beso: estos son los besos más emblemáticos de la historia del cine

Si atrapar a un villano es el punto más álgido de un thriller, el romance en el cine tiene en los besos su clímax existencial. Un actor de amor que se ha reflejado en la gran pantalla cientos de veces, creando así algunas de las secuencias más inmortales e imborrables del séptimo arte. Algunos son amores imposibles, otros consolidados e incluso a veces, el ejercicio simbólico de una traición. Aprovechando que hoy es el Día del beso, os traemos un repaso de las películas más especiales que nos recuerdan este momento tan mágico del arte:

‘Retrato de una mujer en llamas’

Es uno de los últimos fenómenos cinematográfico europeos. Con Retrato de una mujer en llamas,  Céline Sciamma demostró por qué es una de las cineastas francesas más prometedoras de la actualidad. Un amor prohibido en la Francis del Siglo XVIII. Un beso que se quedó grabado en el recuerdo de Marianne y Héloïse como el mito de Orfeo y Eurídice, pura poesía memorizada que permanecerá viva para siempre en la mente de sus protagonistas. Un Día del beso moderno no se podía quedar sin una cinta reciente como referencia.

‘Deseando amar’ : los besos que no se dieron

Parece contradictorio, pero recordar casi siempre lo buena que es Deseando amar es casi un deber moral. La catalogada como historia de (no) amor más grande de todos los tiempos trae consigo, todo aquello que no pudo ser entre Tony Leung y Maggie Cheung y por tanto, también el beso que sucede en nuestra cabeza como espectadores pero que aquí nunca llega a producirse. Nos quedan eso sí, los cruces de miradas y el acompañamiento taciturno de dos rechazados que se consuelan en su desamor.

‘De aquí a la eternidad’

Es una de las escenas más míticas y románticas del celuloide, además de haberse visto parodiada en múltiples ocasiones, como por ejemplo en la animada Shrek 2. Lo cierto es que no se nos ocurre un actor de amor más representativo para el día del beso que el encuentro en la playa, a golpe de arena de mar, entre Burt Lancaster y Deborah Kerr. Todo y cuando en un principio, dicho beso y abrazo no aparecía en el primer guion de De aquí a la eternidad del título dirigido por Fred Zinnemann. La idea principal surgió en el mismo momento del rodaje e iba a ser con ambos de pie. Sin embargo a Lancaster le gustaba más la idea de rebozarse por el suelo. Ya sabemos quién logró convencer al otro.

‘Spider-Man’

¿Quién se iba a imaginar que uno de los besos más reconocidos de la cultura popular iba a ser creado por un cineasta como Sam Raimi? Ya sea por la composición o por ese encuentro de mundos entre el héroe y su amada, es propio señalar lo llamativo que este, sea el plano más reconocible de la primera película de Spider-Man. Ninguna de las siguientes adaptaciones ha conseguido emular el momento.

Cualquiera de ‘Cinema Paradiso’

Ver Cinema Paradiso es literalmente, ver muchos de los besos más emblemáticos de la historia del celuloide. En una Italia llena de censura, el párroco del pueblo corta todas las escenas de amor en las películas que se proyectan en el Cinema Paradiso. Allí, el joven Salvatore descubrirá el amor por el cine, gracias al proyeccionista Alfredo. Un amor y nostalgia transmitida a través de todos esos besos que de niño, jamás vio en la pantalla.

‘Desayuno con diamantes’

Vale que en la novela de Truman Capote al final no hay ni beso, ni felicidad ni reencuentro, más bien drama y soledad. Pero esto es Hollywood y si alguien conseguía transmitir el romanticismo en la gran pantalla esa era Audrey Hepburn. Desayuno con diamantes emula ese clásico final romántico que todos conocemos y posiblemente sea un beso de portada clave en cualquier Día del beso de cualquier año. Simplemente atemporal.

‘La dama y el vagabundo’

La animación también tiene sus momentos románticos. Más allá de clásicos como Blancanieves, Cenicienta o historias recientes como Aladdin, La dama y el vagabundo es con diferencia la historia de amor por excelencia de la factoría Disney. El beso de estos dos perros pasa por ser accidentado, pero también muy divertido.

‘El imperio contrataca’

Cuando se proyectó la primera Star Wars en 1977, seguramente todo el mundo pensaba que Leia y Luke terminarían enamorándose. Sin embargo, los giros narrativos de Lucas son caprichosos y estos, terminaron siendo hermanos e hijos del gran villano de la saga, Darth Vader. Fueron la princesa y Han Solo los que protagonizarían el encuentro romántico por excelencia de la franquicia.

Bonus: ‘El padrino II’

Este beso poco tiene de amor y mucho de traición. Michael Corleone (Al Pacino) besa a su hermano Fredo (John Cazale) porque sabe que este es participe en cierta forma de negociar con Johnny Ola, un mafioso rival que ha intentado matarle. «Sé que fuiste tú. Me rompiste el corazón» es la shakespeariana frase que el padrino le dice a su hermano antes de condenarlo.