El padre de las niñas Tomás Gimeno ya lo avisó a la madre: «No las volverás a ver»

A las pequeñas, de 1 y 6 años se les perdió la pista el pasado 27 de abril junto con su padre, en Tenerife

Tomás Gimeno
Tomás Gimeno, el padre de las niñas.

La noche del pasado 27 de abril, el padre de las niñas desaparecidas, Tomás Gimeno, llamó a la madre de las pequeñas para decirle que no le volvería a ver, pero tampoco a las niñas: «No las volverás a ver». Precisamente el portavoz de la familia, Joaquín Amills, señaló hace días nuevos datos de la conversación que mantuvo el padre con Beatriz. Así, le dijo «claramente que se llevaría a las niñas y que no las iba a ver más ni a él tampoco. Él decía que iba a cuidar a las niñas muy bien y se lo repitió toda la noche».

A las pequeñas, Anna y Olivia de 1 y 6 años se les perdió la pista el pasado 27 de abril junto con su padre, en Tenerife. Por su parte, la madre de las niñas desaparecidas se mostraba segura de que las pequeñas se encontraban vivas y que estarían junto a su padre, Tomás Gimeno, a pesar de haberse encontrado en el fondo del mar una botella de aire comprimido y una funda nórdica propiedad del padre de las niñas.

En este caso y como es evidente todo el mundo tenía la esperanza de que estuvieran vivas, de que se las hubiera llevado lejos. Así, Joaquín Amills señalaba que continuaban «con la esperanza del primer día, que Tomás se ha llevado a sus hijas».

Joaquín Amills, señalaba también que esa botella de buceo y el nórdico «los pudo arrojar [Tomás Gimeno] por la borda y que forman parte de la obra escénica para hacer creer que ha terminado con su vida y la de las niñas», y recuerda que él había manifestado «la idea de cambiar de continente a su círculo íntimo», por lo que seguían pensando en esta línea «hasta que no haya algo que sea firme».

En estos momentos aquellos deseos de toda una sociedad de que pudieran estar vivas se desvanecieron con la aparición de un cuerpo sin vida de una aparente menor, como informó la Delegación del Gobierno en Canarias.

De esta manera y entre los muchos relatos que se han ofrecido durante estos días figuran algunos con los que se ayuda a completar y comprender el perfil psicológico de Tomás Gimeno, el desaparecido padre y a quien se ha buscado sin descanso día y noche. Según diferentes informaciones se ha constatado que era «meticuloso y siempre hacía cosas como reto para salirse con la suya».

 

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