Los múltiples beneficios que supone andar en la playa para tu salud
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Para muchas personas, hay pocas cosas más relajantes que salir a dar un paseo por la playa, aprovechando la ocasión para olvidarse por un momento de los problemas, para conectar con la naturaleza y dejarse llevar. Sin embargo, pocos conocen los beneficios de andar en la playa que la propia ciencia ha descubierto, y que constituyen una razón más para realizar una escapada.
En efecto, probablemente somos conscientes de que si realizamos algún ejercicio físico sobre la arena, el desgaste de energía será mayor, ya que no se trata de nuestro medio habitual, y el esfuerzo que debe hacer el cuerpo para desplazarse, sobre todo las piernas, aumentan en enorme proporción.
No obstante, traducir eso en las ventajas de andar en la playa puede ser un poco complicado si no tenemos los conocimientos al respecto, así que en esta ocasión vamos a destacar varios beneficios implícitos de caminar sobre la arena y a la orilla del mar.
¿Qué ofrece andar en la playa para la salud?
Quemamos más calorías
Basta andar por la playa un buen rato para que esa caminata se convierta en poco menos que un entrenamiento intenso. Y es que, como decíamos, la arena nos obliga a hacer más fuerza, de modo que las piernas requieren de más energía, y esto conlleva una quema de calorías de hasta un 50% superior a la que tendríamos recorriendo las mismas distancias pero en otras superficies.
Fortalecemos los músculos
Ese esfuerzo adicional del que estamos hablando también produce un fortalecimiento del músculo, de cada uno de los grupos musculares, articulaciones y tendones que participan al desplazarnos.
Reducimos el riesgo de lesiones
Si bien es cierto que pasamos por un desgaste mayor, caminar por la playa implica menos impacto para las articulaciones, por lo que el riesgo de sufrir lesiones es menor, y si a eso le sumamos la ganancia en fuerza de los músculos, además es menos probable tener contracturas o desgarros.
Mejoramos el estado de ánimo
Esto sí que no hace falta que te lo explique la ciencia, y es que todos nos sentimos mejor luego de dar un paseo por la playa. Nuestro estado de ánimo mejora, estamos más presentes con las sensaciones del organismo y, en general, afrontamos la vida con más optimismo.
Previene la osteoporosis
O, lo que es igual, caminar por la playa fortalece los huesos, dado que la exposición al sol favorece la absorción de vitamina D, la asimilación del calcio y, así, protege los huesos de enfermedades.
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