El truco viral de las abuelas asturianas para dar más sabor a las lentejas: cambian el chorizo por esto
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Las legumbres forman parte de la gastronomía del día a día en muchas regiones de España, y las lentejas estofadas son un plato recurrente en los hogares. Sin embargo, algunas recetas tradicionales incluyen ingredientes que pueden hacerlas más pesadas para la digestión. En Asturias, donde la cocina de cuchara es protagonista, las abuelas asturianas tienen un curioso truco.
Curioso, porque a pesar de no recurrir al chorizo, el sabor se potencia al doble con este ingrediente. Y cabe remarcar, las lentejas son una fuente importante de proteínas vegetales, fibra y otros nutrientes esenciales. Y es una pena que el chorizo, que posee contenido graso, pueda resultar indigesto. No hay de que preocuparse: la alternativa de estas abuelas mantiene la esencia del plato.
¿Cuál es el truco de las abuelas asturianas para dar más sabor a las lentejas?
El secreto de las abuelas asturianas reside en la selección de ingredientes y en la forma de preparación del sofrito. Para ello, emplean un método que intensifica el gusto del plato sin necesidad de embutidos. Y esto, porque el truco reside en utilizar costillas de cerdo. Tan simple como eso.
Pasos fundamentales para su elaboración:
Más consejos para potenciar el sabor del guiso de lentejas
Además de elegir bien los ingredientes, hay otros factores que pueden hacer que las lentejas estofadas sean más sabrosas:
- Uso de caldo casero: sustituir el agua por un caldo de verduras o carne casero, dado que realza el sabor del plato.
- Tiempo de reposo: como muchos guisos, las lentejas ganan en sabor si se dejan reposar unas horas antes de consumirlas.
- Control de la sal: si se utilizan ingredientes salados como el jamón, es recomendable ajustar la cantidad de sal para evitar que el plato quede demasiado fuerte.
- Cocción lenta: permite que todos los sabores se integren de manera óptima y que las lentejas adquieran una textura melosa.
