El «escudo social» de La Moncloa

El «escudo social» de La Moncloa

El Gobierno socialcomunista lleva presumiendo de haber desplegado un gigantesco «escudo social» para que nadie se quedara atrás como consecuencia de la crisis desatada por el coronavirus, pero 36 camareros de La Moncloa se van a ir a la calle después de que el Ejecutivo haya dado carpetazo al contrato con la empresa adjudicataria que llevaba meses sin pagar a sus trabajadores. La nueva empresa que busca el Gobierno no tendrá obligación de subrogar a la anterior plantilla, de modo que todo dependerá de la voluntad de la adjudicataria del contrato, si bien para evitar pagar antigüedad y otros complementos salariales la nueva encargada de las cafeterías del complejo presidencial buscará seguramente un nuevo equipo de empleados. Es decir, que el Gobierno se lava las manos y permite que 36 familias queden en la más absoluta desprotección.

De hecho, el Ministerio de Presidencia ya ha decidido resolver la situación sin contar con los trabajadores antiguos del contrato titulado «Servicio de restaurante y bar cafetería; así como atención y limpieza de estas dependencias y offices en el Ministerio de la Presidencia en el Complejo de la Moncloa». Es cierto que la empresa contratista no estaba al corriente del cumplimiento de sus obligaciones fiscales ni con la Seguridad Social, como también es cierto que los trabajadores sufrían permanentes retrasos en el cobro de sus nóminas. Pero precisamente por eso, porque han sido los trabajadores los grandes perjudicados de la situación, Presidencia podría haber hecho algo más. No ha sido así y los empleados se han quedado sin trabajo después de llevar meses soportando una situación laboral intolerable. Desde un punto de vista legal, el ministerio tiene razón (así lo ha sentenciado el Tribunal Supremo), pero bien podría haber mostrado mayor sensibilidad para tratar de dar una solución a unos trabajadores que se han quedado literalmente tirados. Por una elemental cuestión de humanidad y para que eso del «escudo social» fuera algo más que un cliché propagandístico.

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