Gorbea, comisionado para la Cañada: «La izquierda quiere pintar de colores el barro antes que realojar»
El ex comisionado, absuelto tras dos años de proceso judicial: "En la Cañada hay un bar ilegal y un prostíbulo"

Markel Gorbea, ex comisionado de la Comunidad de Madrid para la Cañada Real Galiana, denuncia en una entrevista en OKDIARIO que la izquierda política prefería «pintar de colorines el barro de la Cañada» antes que proceder al realojo de las familias en condiciones dignas.
Tras ser absuelto completamente el pasado 16 de julio tras una imputación propiciada por Podemos, Gorbea ha criticado duramente que «cuando he sido absuelto, nadie ha dicho nada».
El ex alto cargo del gobierno madrileño ha padecido «casi dos años y medio» de proceso judicial tras una denuncia que, según sus palabras, fue «articulada por parte de ciertos actores políticos que les venía muy bien para las elecciones que había en mayo de 2023». La imputación surgió por una demolición puntual en una vivienda cuya orden correspondía competencialmente al Ayuntamiento de Madrid y que Podemos recurrió a los tribunales.
Gorbea explica que realizó «una visita sistemática a una serie de parcelas que estaban en riesgo de incendio» tras un informe elaborado en verano de 2022. «Hubo un incendio semanas antes, hubo un incendio semanas después y uno de esos incendios hubo una víctima», ha recordado.
El ex comisionado mandó un correo electrónico al Ayuntamiento «poniendo en su conocimiento cómo estaban esas parcelas» y la administración municipal «por su cuenta y riesgo y con su competencia hizo una orden de demolición».
Persecución sistemática
Podemos y Más Madrid, según afea Gorbea, «denunciaban absolutamente todo» a través de «dos actrices políticas»: las diputadas Alicia Torija y Alejandra Jacinto. «Casi todas de ellas, unas 30, quedaban archivadas menos una», ha explicado el ex comisionado, quien ha criticado la «persistencia y la obsesión por parte de izquierda de sacar un rédito político». Recurrían por lo penal a los tribunales a pesar de que habían firmado el pacto regional por la Cañada que fijaba que se iba a desmontar el Sector 6, el más problemático.
El proceso judicial ha requerido «usar un traductor para que el supuesto afectado por el derribo de la chabola pudiera ser entendido» en la Audiencia Provincial. «Decía que llevaba más de 20 años en España y no sabía hablar castellano…», deja caer. Finalmente, «en cuatro días la Audiencia Provincial a mí me absuelve completamente y sanciona administrativamente al funcionario municipal».
Por su parte, destaca que antes de la absolución, la Fiscalía de Medio Ambiente de Madrid, «cuyo fiscal es miembro activo de Podemos», realizó «sendos escritos en los que se reactivó la causa» después de que quedara sobreseída dos veces por el Juzgado de Instrucción número 20 de Madrid.
Realojos exitosos
Gorbea ha defendido el modelo de realojo frente a la alternativa de «pintar de colorines» los asentamientos irregulares. «Estamos realojando a gente que vive en chabolas de 50 o 70 metros cuadrados y con parcelas de 500 metros, pero en un barrizal» en «pisos de 70 a 80 metros cuadrados, con luz, agua y todos los servicios públicos».
El ex comisionado se ha encontrado «casualmente con tres personas de Cañada Real realojadas» durante estos años. «Las tres familias que fueron realojadas en tres municipios distintos, me dieron las gracias, me felicitaron por la actuación que hicimos y que les había cambiado la vida».
Los datos avalan este modelo: «Había habido un caso de inadaptación a vivir en un piso con vecinos sobre un total de 136. O sea, menos 1%». La Unión Europea exige que el realojo sea diseminado «para no hacer guetos» y establece que «si en una cuadrícula tienes aquí un piso, en los edificios de alrededor, no puede haber ningún realojado».
«Un mundo paralelo»
Gorbea ha revelado la complejidad del asentamiento, describiendo un «mundo paralelo» donde «vives entre el asombro perpetuo». Ha documentado «hasta 40 transformadores que son del tamaño de un Fiat 500» conectados a torres de «20.000 voltios» para alimentar plantaciones de marihuana que llegaron a alcanzar las «18.000 plantas» en una macrooperación policial. Ahora el delegado del Gobierno se limita a «decir a todo que no a lo que dice la Comunidad de Madrid». «Antes era un político pero resolutivo», destaca..
El ex comisionado ha narrado episodios rocambolescos como un propietario de prostíbulo que «se atrincheró en un primer piso» y «se puso a disparar a todo el mundo» con «su fusil de asalto», lo que provocó el corte temporal de la carretera A3 o la proliferación de «jabalíes vietnamitas» que «llegan a pesar 300 kilos» tras cruzarse cerdos salvajemente con jabalíes.
A pesar del coste personal -«a nivel personal ha sido un peso brutal, criminal»- Gorbea no se arrepiente de la experiencia: «Ha sido una universidad. Yo me he doctorado». Cuando le propusieron el cargo le preguntaron si se atrevía, y respondió: «Soy de Bilbao». Una respuesta que resume la determinación con la que afrontó uno de los retos sociales más complejos de la Comunidad de Madrid.