Almeida duplicará los sanitarios para combatir el consumo de droga en la Cañada Real
Se incorporan siete sanitarios más, por lo que la plantilla aumenta hasta los 13 especialistas
El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, lleva años poniendo el foco en el control de la drogodependencia en la Cañada Real. En este enclave viven, de forma permanente, personas con adicciones en una situación de mucha vulnerabilidad. Por eso, en octubre de 2019, Madrid Salud puso en marcha un Centro de Reducción del Daño que ahora ha reforzado duplicando la plantilla de médicos y enfermeros. Concretamente, se incorporan siete sanitarios más, por lo que la plantilla aumenta hasta los 13 especialistas, frente a los seis que hay en la actualidad. Con estas incorporaciones, se pretende que haya dos enfermeras y un médico durante todo el servicio y se refuerza el servicio de monitor con más horas.
La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Madrid ha autorizado el contrato de servicios para la ejecución y gestión del Centro de Reducción del Daño y prevención de sobredosis para personas con adicciones, vinculadas o residentes en la Cañada Real, con nuevas dotaciones por un importe de 1,7 millones de euros y una duración de dos años, prorrogables por otros tres. El Centro de Reducción del Daño que está disponible los 365 días y ofrece servicios básicos como higiene, alimentación, ropa y un espacio de descanso, así como atención psicosocial para paliar las consecuencias negativas asociadas al consumo de drogas. Ahora, Madrid Salud da un paso más y amplía los servicios de este centro, que incluirá atención sociosanitaria básica, personal médico y de enfermería y, como novedad, una sala de prevención de sobredosis.
Además de la prestación de una serie de servicios sociosanitarios, una de las prioridades del centro es establecer una relación interpersonal con las personas con adicciones activas que no están en contacto con otros servicios de ayuda, con el fin de propiciar que puedan iniciar un tratamiento adecuado a sus peculiaridades. También se busca mejorar las condiciones básicas de salud de las personas adictas que residen en la Cañada Real, prevenir y paliar las consecuencias negativas asociadas al consumo y realizar la captación asistencial de mujeres con problemas de adicción, generalmente en situación de mayor vulnerabilidad y exclusión social.
La nueva sala de prevención de sobredosis tiene como objetivos proporcionar supervisión sanitaria en el consumo intravenoso de sustancias, prevenir las consecuencias derivadas de la mala práctica y falta de higiene del consumo intravenoso, sensibilizar e informar sobre prácticas de riesgo y de protección ante la transmisión de enfermedades, motivar el cambio a otras vías de consumo de menor riesgo y reducir el consumo en la vía pública, así como la realización de pruebas rápidas de detección de enfermedades transmisibles.
Drogadicción
La lucha del Ayuntamiento de Madrid contra las drogas no se circunscribe únicamente a la Cañada Real. Recientemente, el Consistorio de Almeida ha aprobado, con un importe superior al millón de euros, la prórroga del contrato, dividido en dos lotes, para seguir ejecutando hasta 2027 el programa de prevención de adicciones en entornos comunitarios para adolescentes y jóvenes del distrito de Villaverde y el programa de atención en proximidad para personas en situación de riesgo o con adicciones en el distrito.
En septiembre de 2022, el Instituto de Adicciones de Madrid Salud estrenaba en Villaverde un programa específico de prevención de adicciones para adolescentes y jóvenes (Espacio PAD Joven Villaverde), con actividad y presencia en los cinco barrios que conforman el distrito: Los Rosales, Los Ángeles, San Cristóbal, Villaverde Alto y Butarque. Desde entonces, se ha convertido en un recurso de referencia juvenil frente al consumo de alcohol y otras sustancias, el uso abusivo de pantallas, redes sociales, juegos de azar y apuestas deportivas, etc.
Dada la eficacia que ha demostrado este proyecto, en el que han participado en estos dos años 12.530 jóvenes y adolescentes y que ha realizado 2.159 actividades en la calle, 2.112 en centros educativos y 5.237 en recursos comunitarios, el Ayuntamiento considera necesario prorrogar el contrato hasta 2027, con un importe de 534.700 euros.
El objetivo es dotar de recursos a las nuevas generaciones que les permitan afrontar con éxito los retos y conflictos que se les planteen e incorporar las herramientas precisas para hacer frente a situaciones de riesgo, incluidas las relacionadas con las adicciones. Además, se busca detectar y captar aquellos posibles casos de jóvenes que puedan estar desarrollando conductas adictivas.
El programa se dirige a jóvenes y adolescentes de entre 14 y 24 años y a sus personas adultas de referencia, desarrollando una variada oferta de acciones que contemplan la educación de calle, la información preventiva, la formación a profesionales y la promoción del ocio positivo y saludable. Además, a través del Espacio PAD se ofrece una alternativa saludable para el tiempo libre frente a otros modelos de ocio asociados al consumo de alcohol y otras sustancias.