La pareja del asesor de Montero detenido por altercados protagonizó un atentado ecologista en México
La pareja del asesor de la ministra Irene Montero detenido por un altercado con la Policía en el aeropuerto de Santiago protagonizó un atentado ecologista en México. Ramón P. celebró su cumpleaños con una fiesta y lujo por todo lo alto en las playas de un Parque Natural protegido, sin contar con permiso para ello. La fiesta terminó con una multa de cuatro millones de pesos mexicanos.
El conocido empresario mexicano Ramón P. es la persona que acompañaba al coordinador de gabinete de la ministra Irene Montero cuando éste se enfrentó con dos azafatas de Ryanair y con una pareja de policías del aeropuerto de Lavacolla.
Es el «acompañante», así figura en las diligencias, que recogió del suelo el teléfono móvil que perdió un policía durante la violenta trifulca protagonizada por el asesor de Irene Montero. Los policías creen que intentaba quedarse con el teléfono, ya que le preguntaron por el aparato y negó tenerlo, hasta que desde comisaría llamaron al teléfono del policía y el aparato apareció en poder del ciudadano mexicano.
Se trata de un empresario muy renombrado del estado mejicano de Veracruz que hace cinco años protagonizó un sonado escándalo en su país al celebrar su fiesta multitudinaria de cumpleaños en un santuario natural de desove de tortugas de una especie en extinción.
Los colectivos ecologistas mexicanos denunciaron cómo el 25 de agosto de 2018 en la isla de Salmedina, «los organizadores de la fiesta colocaron carpas y bocinas sobre nidos de tortugas, rompieron huevos y arrojaron a las recién nacidas al mar ocasionando su muerte segura, pues no están listas para la supervivencia». También hubo daños a los arrecifes porque atracaron sus yates a poca profundidad, en esa zona donde está prohibido el turismo de alto impacto para proteger el ecosistema y a las especies que allí habitan.
La prensa mexicana señaló directamente al «acompañante» del asesor de Irene Montero como responsable del atentado medioambiental, hasta el punto de que la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) y la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP) de México enviaron especialistas que visitaron la zona para registrar los daños. En el espacio natural protegido, los inspectores hallaron restos de material pirotécnico, botellas, «popotes», colillas de cigarro y cubiertos de plástico.
Las autoridades mexicanas pudieron investigar los hechos porque los asistentes subieron fotografías y vídeos a sus redes sociales que detectaron organizaciones ambientales. Éstas denunciaron que la fiesta tuvo como motivo la celebración de los 52 años de un arquitecto de nombre Ramón P., muy conocido en Veracruz, quien cerró sus cuentas en redes sociales al conocerse el escándalo.
Finalmente, el Gobierno mexicano impuso una multa de más de 4 millones de pesos o 54.000 euros «al empresario organizador de la fiesta» en la Isla de Salmedina del Parque Nacional Arrecifal Veracruzano. El empresario no tuvo responsabilidades penales porque según el informe de Medio Ambiente no murió ningún animal, quedando el asunto en una grave infracción administrativa. Sin embargo, sí tuvo que hacer frente a la abultada multa por organizar la fiesta «sin autorización correspondiente».
En la sanción, las autoridades señalan que durante la fiesta de cumpleaños se manipuló fauna poniéndola en peligro. También abandonaron basura en el parque natural protegido y usaron pirotecnia que hubiera podido ocasionar un incendio, además del impacto que generaron el humo y los ruidos de las explosiones.