El misterio que oculta la basílica de Santa María la Mayor donde descansará el Papa: «Aquí está…»
En esta basílica hay una reliquia de la cuna del Santo Pesebre de Cristo
Está situada en la colina más alta de Roma


En esta época tan alejada de la trascendencia, nos cuesta interpretar el simbolismo que rodea la elección del Papa Francisco por la basílica de Santa María la Mayor como lugar de su sepultura. Así lo determinó en su testamento hace casi tres años.
Su lugar de sepultura estará situado entre la Capilla Paulina y la Capilla Sforza en la basílica romana. Su tumba será muy sencilla, sólo una inscripción dejará testimonio de presencia: Franciscus. Pero… ¿por qué el Papa se decidió por este lugar?
No te pierdas esta interesante entrevista que realizamos al sacerdote español Raúl Hernández, de la archidiócesis de Valencia, conocido en redes como Kurateka, y quien conoce a las mil maravillas todos los secretos que rodean a este templo, el más español de toda Roma.
Todo hace pensar que hay muchos aspectos detrás de la decisión del Papa por escoger la basílica de Santa María la Mayor. Hay que tener en cuenta y como dice este sacerdote: «Cuando Dios se olvida de firmar, pone la casualidad de por medio».
Hay que tener en cuenta que esta iglesia pertenece a la Santa Sede, pese a estar fuera del territorio de la Ciudad del Vaticano y es el templo dedicado a la Virgen María más grande de Roma. El Papa solía venir a rezar con frecuencia a Virgen del Populo, patrona de la ciudad eterna.
Pero… ¿sabías que aquí se guarda una reliquia de la cuna del Santo Pesebre en el que habría nacido Jesucristo? Se conoce como la cripta de Belén y es un lugar de peregrinación de miles de católicos.
Kurateka da un paso más en este misterio: «El primero en hacer un belén fue Francisco de Asís y el nombre es Francisco precisamente por este Santo y aquí tenemos las reliquias del Pesebre a los pies del altar de Santa María la Mayor. Es algo muy simbólico ese nacer pobre de Cristo y morir pobre en la cruz coronado de espinas».
Además, el lugar está vinculado al milagro de la Virgen de las Nieves, que se conmemora cada 5 de agosto, cuando, en plena sequía en Roma, la Virgen se apareció al Papa Liberio, señalando este lugar donde cayó una gran nevada. El perímetro donde calló la nieve sería a posteriori la planta de la futura iglesia.
Según Kurateka, «el pontificado del Papa Francisco se comprenderá pasado un tiempo. Fue un Papa que generó confusión en muchos aspectos, pero también el primero que se atrevió a iniciar muchas batallas que no se habían nunca emprendido. Su sepultura aquí forma parte del mensaje que debemos interiorizar para comprender qué nos quiere decir».