Descontento en el partido de Merkel por las concesiones al SPD
Las grandes concesiones realizadas por la canciller Angela Merkel al Partido Social Demócrata (SPD) en pos de asegurar la reedición de la gran coalición ha desatado este jueves el descontento en el seno del bloque conservador.
«¡Puf! Al menos tenemos aún la Cancillería», ha tuiteado el abogado de la Unión Cristiano Demócrata (CDU) Olav Gutting después de que el SPD se quedara con las importantes carteras de Finanzas, Exteriores, Justicia, Familia y Trabajo y Asuntos Sociales, a pesar de ser el socio menor del futuro Gobierno de coalición.
Mientras, la CDU que lidera Merkel y que en los comicios generales del 24 de septiembre fue con gran diferencia la fuerza más votada, se conforma con los ministerios de Defensa, Economía y Energía, Sanidad, Educación y Agricultura y se despide además del Ministerio del Interior, que va a parar a manos de su partido hermanado de Baviera, la Unión Cristiano Social (CSU).
Desde el ala empresarial de los conservadores han criticado duramente la concesión del todopoderoso Ministerio de Finanzas al SPD, que en las últimas dos legislaturas estuvo en manos de la CDU.
«El hecho de que la cartera de Finanzas esté en manos del SPD hace prever un final de la sólida política presupuestaria», ha declarado a DPA Werner M. Bahlsen, presidente del consejo económico de la CDU, sobre el acuerdo alcanzado el miércoles entre conservadores y socialdemócratas.
El malestar se hará patente también con toda probabilidad en el congreso del partido el próximo 26 de febrero, donde los 1.000 delegados de la CDU están llamados a votar el acuerdo alcanzado el miércoles. Ese día, se convertirá también en el mayor test de la autoridad política de Merkel después de más de doce años como líder de Alemania.
«El diseño del gabinete, como se ha hecho ahora, es un error político», ha declarado Christian von Stetten, otro abogado de la CDU, en la televisión pública alemana ARD. «El hecho de haber prescindido del Ministerio de Finanzas no será algo que entusiasme a la mayoría de miembros de la CDU», ha añadido.
El líder de la CSU, Horst Seehofer, ha calificado el contrato de coalición como algo bueno. «Hemos previsto muchas cosas buenas para la gente. Ese es el principal objetivo», ha comentado y ha puesto como ejemplo la construcción de pisos.
Condiciones del SPD
Sin embargo, el que será el ministro de Interior en el futuro Ejecutivo ha indicado que el SPD «insistió mucho en que quería los tres ministerios que finalmente obtuvo o si no, no se podría unir al Gobierno».
También ha reconocido que las negociaciones estuvieron a punto de fracasar en la última noche y que la pregunta de «continuamos o no» sobrevoló la sala de reuniones. Al final primó «la responsabilidad con respecto a la democracia», ha comentado.
La cúpula de la CSU ha aprobado este jueves el acuerdo de coalición compuesto por más de 170 páginas y que deberá salvar aún el escollo de recibir luz verde de los más de 460.000 militantes del SPD. El resultado de la votación del SPD se dará a conocer como tarde el 4 de marzo.
El acuerdo llegó tras más de cuatro meses sin Gobierno y más de tres semanas de negociaciones. Finalmente, y tras lograr limar asperezas en puntos como los refugiados, la CDU, la CSU y el SPD lograron poner fin a la incertidumbre generada tras los comicios de finales de septiembre.