Parlamento de Cataluña

ERC rechaza una enmienda de Cs contra el racismo para no condenar el «bestias taradas» de Torra

El diputado naranja David Mejía pide a los separatistas que "sean creíbles" en lugar de "venir a dar lecciones"

Torra anima ahora a los españoles a hacer turismo en Cataluña: "Serán acogidos con una sonrisa"

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Segundo Sanz

ERC ha rechazado este jueves condenar los insultos que el actual presidente de la Generalitat, Quim Torra, dirigió a los españoles en su polémico escrito ‘La llengua i les bèsties’, donde empleó el calificativo de «bestias taradas». El partido de Oriol Junqueras, que defendía una moción sobre racismo, se ha negado a introducir una enmienda de Ciudadanos que pedía dicha condena al Parlament de Cataluña sobre las palabras del xenófobo Torra.

El diputado de Ciudadanos David Mejía ha señalado desde la tribuna, durante la defensa de la enmienda de los naranjas, que «cuando uno se reconoce y se enorgullece de su propia pluralidad, cuesta entender que quienes suspiran por una sociedad homogénea y cerrada en sí misma hagan declaraciones como las del señor Torra, quien decía que los españoles eran bestias taradas con forma humana»

«Leyendo su moción —ha proseguido Mejía— pensé que habían decidido hacerse el harakiri político pero me da que no es así. Para condenar el racismo siempre nos encontrarán y tendrán nuestro apoyo, pero si, de verdad, quieren resultar creíbles empiecen por condenar las muestras de xenofobia que han dado algunos dirigentes de su partido a lo largo de la historia, así como las palabras del señor Torra. En lugar de venir a dar lecciones, lo que tendrían que hacer es un propósito de enmienda y así resultarían creíbles», ha lanzado el diputado naranja a los separatistas.

La moción presentada por ERC instó al Parlament en su primer punto a mostrar «su preocupación ante el auge de actitudes xenófobas y el aumento del discurso de odio dirigido hacia personas migradas y racializadas alentadas por partidos y organizaciones de extrema derecha». Otro de los puntos de la citada moción emplazó a la Cámara autonómica a «trabajar para lograr una sociedad libre de discriminaciones, revisando sus privilegios, y reconocer que las instituciones generan violencia institucional que ayuda a perpetuar el racismo y la desigualdad estructural».

Además, la iniciativa requirió al Parlament «rechazar cualquier tipo de expresión o actuación de carácter racista o que implique discriminación racial en cualquier ámbito de la sociedad». En este contexto, Ciudadanos pidió a ERC que introdujera su enmienda de adición, a modo de último punto en el texto con la siguiente literalidad: «El Parlamento de Cataluña condena por racistas y supremacistas las expresiones insultantes, ofensivas y discriminatorias del señor Torra vertidas en ‘La llengua i les bèsties’». Sin embargo, los socios de Quim Torra en el Govern se negaron a aceptar esta enmienda.

A través de las redes sociales, Ciudadanos ha recordado también los «carteles racistas» de grupos de ERC, en alusión a Estat Catalá y Nosaltres Sols!, integrados hoy en las filas republicanas. «Si quieren combatir el racismo, cambien su partido. Para denunciar la discriminación, comiencen condenando su historia», ha replicado la formación de Inés Arrimadas a los secesionistas.

Salvar el turismo

Precisamente, el presidente de la Generalitat ha apelado estos días a los españoles para tratar de salvar el turismo en Cataluña este verano, un sector gravemente afectado por la pandemia del coronavirus en toda España y con dificultad de atraer a clientes de fuera. «Aquí todo el mundo es bienvenido y todo el mundo será acogido con una sonrisa y toda la seguridad del mundo», afirma ahora Torra.

Una posición que poco tiene que ver con el tono que mantenido Quim Torra desde que llegase a la Generalitat de Cataluña en 2018. El dirigente separatista siempre ha defendido la independencia de la región del resto de España y ha llegado a insultar gravemente a los españoles en varios artículos. A estos mismos ciudadanos a los que ahora pide ayuda para salvar el turismo de Cataluña, les llamó «bestias carroñeras, víboras, hienas con una tara en el ADN».

«Ahora miras a tu país y vuelves a ver hablar a las bestias. Pero son de otro tipo. Carroñeras, víboras, hienas. Bestias con forma humana, que destilan odio. Un odio perturbado, nauseabundo, como de dentadura postiza con verdín, contra todo lo que representa la lengua», escribió Torra en un artículo publicado el 19 de diciembre de 2012 en un diario independentista subvencionado por la Generalitat.

«Fobia enfermiza»

El dirigente separatista no se quedó ahí y también afirmó que a los españoles «les repugna cualquier expresión de catalanidad». «Es una fobia enfermiza. Hay alguna cosa freudiana en estas bestias. O un pequeño estremecimiento en su cadena de ADN. ¡Pobres individuos! Viven en un país del que desconocen todo: su cultura, sus tradiciones, su historia. Se pasean impermeables a cualquier acontecimiento que represente el hecho catalán. Les crea urticaria. Les rebota todo lo que no sea español y en castellano. Tienen nombres y apellidos, las bestias. Todos conocemos a algunas. Abundan, las bestias. Viven, mueren y se multiplican», añadió.

El objetivo de deshumanizar al enemigo, presentándolo como «bestias que viven, mueren y se multiplican», es una clásica estrategia de la propaganda de guerra con el fin último de destruirlo. Como «intelectual», Quim Torra se confiesa admirador de los pensadores del nacionalismo del siglo XIX que, como en el caso de Sabino Arana, fundador del PNV, hunden sus raíces en un racismo supremacista.

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