Díaz será vicepresidenta de Trabajo pero Sánchez negocia con Iglesias que esté por detrás de Calviño

Pedro Sánchez acepta que Yolanda Díaz ocupe una vicepresidencia junto al Ministerio de Trabajo, como le exige Pablo Iglesias. Pero se tendrá que conformar la tercera.  La propuesta que el presidente le ha trasladado al aún vicepresidente segundo, tras su dimisión, pasa por que Díaz mantenga la cartera de Trabajo entre sus funciones y la entrada de Ione Belarra al frente del Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030, a cambio de que Nadia Calviño suba un peldaño en el escalafón y sea vicepresidenta segunda.

Sánchez e Iglesias, que aún se mantendrá en el cargo unos días más, se han reunido este martes en La Moncloa, tras el Consejo de Ministros, para hablar de la nueva estructura del Ejecutivo. Sánchez, que recelaba de que la vicepresidencia segunda estuviera asociada a Trabajo y que Belarra entrase en el gabinete, por sus ataques a Margarita Robles, ha ofrecido al líder podemita mantener las competencias de Díaz por detrás de Calviño y garantizar la entrada de la actual Secretaria de Estado de la Agenda 2030, a cambio de reforzar a la socialista.

El pacto, que aún no está completamente cerrado a falta de «algunos detalles sobre el acuerdo de coalición», modifica ligeramente el documento que suscribieron a finales de 2019 cuando pactaron la formación de un gobierno conjuntamente. Aunque el grueso de lo acordado seguiría en vigor, como el número de miembros de Podemos en el Consejo de Ministros, que será de cinco. Los morados mantendrán una de las vicepresidencias, la tercera en lugar de la segunda, y las carteras de Derechos Sociales y Agenda 2030, Trabajo, Consumo, Igualdad y Universidades.

Calviño, reforzada

La alteración en las vicepresidencias reforzaría a la responsable de Economía y Transformación Digital, Nadia Calviño. La máxima responsable económica del Ejecutivo, que en los últimos meses ha manifestado su cansancio por el desgaste de formar parte de un mismo gobierno con Podemos, vería así recompensado su trabajo dotándole de más poder.

Además de ascender un escalafón en el puesto de mando, a la hora de sustituir al presidente en caso de ausencia fuera de España, mantendrá también la presidencia de la Comisión de Asuntos Económicos por delegación de Pedro Sánchez. El hecho de pasar por delante de Yolanda Díaz, además, también busca rebajar las tensiones entre dos ministras cuya relación no es nada fluida.

En los cambios, aunque en gran medida le vienen impuestos por Iglesias, Sánchez trata de mejorar las relaciones entre ministros y el trabajo del equipo ministerial. En su entorno creen que el intercambio del líder de Podemos por la titular de Trabajo, en una de las vicepresidencias, facilitará precisamente eso. En Moncloa esperan «encajar bien todas las piezas» para que el Ejecutivo «funcione engrasado» hasta que el jefe del Ejecutivo desee convocar elecciones.