Llarena ordenará detener a Anna Gabriel y pedirá su extradición
El Tribunal Supremo ordenará la detención de Anna Gabriel si no acude a declarar este miércoles. Si se encuentra en el territorio comunitario, se realizará por medio de euroorden de detención. Si está en Suiza o en otro país ajeno a este mecanismo, se hará por medio de una orden de detención y extradición. Pero, sea como sea, el juez Pablo Llarena no está dispuesto a permitir que la fuga exima de las responsabilidades penales a la líder de la CUP.
En estos momentos, la ex diputada de la CUP, Anna Gabriel, se encuentra en Ginebra (Suiza), junto a otros miembros de su partido. Gabriel, que tenía que declarar el pasado 14 de febrero en el Tribunal Supremo junto a Mireia Boya, pidió cambiar la fecha de la declaración ante el juez Pablo Llarena, que decidió posponerla al día 21, el próximo miércoles. Ahora, según adelantó OKDIARIO, Anna Gabriel podría no acudir ese día a la cita en el Supremo.
La antisistema ha elegido un país fuera de la UE pero dentro del espacio Schengen, lo que permite la libre circulación de personas pero dificultaría un envío acelerado a España en caso de detención porque no se encuentra dentro del espacio de aplicación de la popular euroorden.
En Ginebra, Anna Gabriel ha contratado los servicios del abogado Olivier Peter, que anteriormente ya defendió a ciudadanos españoles acusados de pertenecer a la banda terrorista ETA. Con él, su abogado en España y ex diputado de la CUP Benet Salellas y con miembros del partido, estudian la situación procesal de la ex diputada y sopesan la decisión final de si acudir o no a la citación judicial ante el Supremo.
A partir de ahora, deberán introducir en sus deliberaciones el hecho de que estén donde estén, el Juez tiene la intención de ordenar su detención.
La intención de Gabriel es explicar este martes, en una comparecencia pública, previsiblemente en Ginebra, cuál es su decisión y por qué vía opta en su situación procesal.
Gabriel ya ha visto el camino que ha seguido Marta Rovira, en libertad bajo fianza. Y sabe que, ante las grabaciones y documentación recopilada por la Guardia Civil, su situación no será fácil ante el Juez Llarena. Y es que la cúpula entera de la CUP, Anna Gabriel y Benet Salellas –su abogado– incluidos, aparece retratada e implicada en los manuscritos golpistas incautados al número dos de Junqueras, Josep María Jové.
El auto del juez Llarena avisó ya de que las actuaciones de los partidos tenían que ser investigadas, no sólo en cuanto al comportamiento de sus líderes particulares, sino también en cuanto a las decisiones estructurales como partido. Pues bien, justo tras esa advertencia, aparece el retrato de la CUP: un partido del que se conocían ya las implicaciones directas de Anna Gabriel, pero del que ahora aparecen hasta cuatro nombres nuevos implicados en los manuscritos golpistas. Y todos los nombres, además, son integrantes de la cúpula del partido.
La CUP bajo la lupa de la Guardia Civil
Los cinco aparecen perfectamente retratados en sus reuniones y deliberaciones para que el golpe de estado avanzase eludiendo la legalidad y la acción de la Justicia. Los nombres en cuestión son los de Anna Gabriel, cabeza visible y permanente de la CUP. Una figura a la que la Guardia Civil considera en permanente coordinación con los golpistas.
El de Benet Salellas, figura igualmente en alza en la CUP y que, tras acceder al cargo de diputado autonómico en 2015, se situó como uno de los diputados designados para incorporarse al equipo de coordinación con el grupo parlamentario de Junts pel Sí. Salellas, además, ha visitado a los ex consejeros durante su etapa de prisión en Estremera y, a lo largo de su carrera profesional, ha sido abogado de miembros integrantes de hasta cinco grupos terroristas.
El nombre de Eulalia Reguant también figura. Fue identificada en las reuniones celebradas el 7 de enero de 2016. De hecho, figura con anotaciones manuscritas que la señalan como figura clave en el planteamiento de que Artur Mas no podía ser presidente de la Generalitat.
Otro de los cargos de la CUP retratado en los papeles en poder ya de la Guardia Civil es Antonio Baños. Fue el cabeza de lista de la CUP en las elecciones regionales de 2015. Salió elegido diputado y anunció su dimisión durante las negociaciones de Junts pel Sí y la CUP por no compartir, en teoría, una alianza con los representantes de la viaje burguesía catalana. Formalizó su renuncia al acta de diputado en enero de 2016. Ahora es miembro de la plataforma Súmate.
Gabriela Serra también figura en las anotaciones. Igualmente elegida como diputada regional en 2015, se sumó al equipo de coordinación con los partidos golpistas para garantizar la gobernabilidad hasta hace escasos días. Todos ellos figuran en repetidas menciones en la agenda personal y manuscrita de Jové incautada por la Guardia Civil. Un diario donde, también se anotó que algunas de las reuniones, por ejemplo la del 31 de marzo de 2016 fue para hacer el “análisis de situación+posibilidad estrategia común”. En las anotaciones de esa cita se añade igualmente “¿podemos encontrar un camino común donde todos nos sintamos cómodos?”. Y se aclara todo ello con referencias directas al proceso ilegal de ruptura con España: “¿Más estructuras Estado? ¿Fecha límite? ¿Cómo haremos salir a la gente a la calle? Necesario avanzar en el proceso constituyente […]. El paso importante es el proceso constituyente”.