Bruselas recrudece la guerra comercial e incrementa la regulación a los juguetes importados
La UE restringe las importaciones y obliga a que los juguetes tengan un pasaporte para entrar en Europa


Bruselas ha decidido recrudecer las condiciones de importación de juguetes a territorio comunitario en plena guerra comercial, según un comunicado emitido por la Comisión Europea. En concreto, el Consejo y el Parlamento Europeo han llegado a un acuerdo político provisional para establecer unas nuevas normas de seguridad para este tipo de productos, aumentando así la regulación para poder vender en este mercado.
Según mantienen las autoridades comunitarias, el objetivo de este recrudecimiento de la normativa es prohibir «el uso de sustancias químicas nocivas», como «disruptores endocrinos y bisfenoles». No obstante, Bruselas pone el foco en los juguetes importados.
«Todos los juguetes contarán con un Pasaporte Digital de Producto para impedir la entrada en la UE de juguetes inseguros, tanto vendidos en línea como fuera de línea», ha decretado.
Un gran porcentaje de estos productos se venden a través de plataformas de e-commerce que tienen su establecimiento en países como China, por lo que este tipo de empresas se van a ver afectadas por la normativa. Una norma que, independientemente de las restricciones materiales, vendrá acompañada de trámites burocráticos más complejos.
Restricciones a los juguetes
Es decir, Bruselas quiere que los juguetes provenientes del extranjero sean como los que se fabrican en suelo comunitario. «El Reglamento establece normas más estrictas para las ventas en línea y otorga a los inspectores mayores facultades para retirar del mercado juguetes peligrosos. Esto garantizará que los juguetes importados sean tan seguros para los consumidores como los fabricados en la UE», ha explicado la Comisión Europea.
Según mantiene, los cambios van a generar una «mejor protección contra sustancias químicas nocivas». La Unión Europea «prohibirá el uso de bisfenoles peligrosos y sustancias perfluoroalquiladas y polifluoroalquiladas (PFAS) en los juguetes».
«Además de las sustancias ya prohibidas, el nuevo Reglamento prohibirá el uso de sustancias químicas que afecten al sistema endocrino (disruptores endocrinos) o al sistema respiratorio, así como las que puedan provocar alergias cutáneas o sean tóxicas para un órgano específico».
Las autoridades de la UE defienden que la nueva normativa también va a hacer que empresas y usuarios hagan un «mejor uso de las herramientas digitales». Para ello, recrudecerán los trámites que tienen que llevar a cabo para operar en el mercado: «Todos los juguetes deberán contar con un Pasaporte Digital de Producto en formato de soporte de datos, como un código QR. Los consumidores y las autoridades verán fácilmente la información del producto, su cumplimiento normativo y demás información».
Los importadores tendrán que presentar este pasaporte en las fronteras de la UE, incluso para los juguetes vendidos en línea. Un nuevo sistema informático examinará todos los códigos QR en las fronteras exteriores e identificará los envíos que requieren controles aduaneros detallados.
«Se facilitará la inspección de juguetes por parte de los inspectores nacionales, ya que la información estará fácilmente disponible en el pasaporte. Esto agilizará las medidas contra los juguetes inseguros en la UE y garantizará que todos los fabricantes de juguetes puedan competir en igualdad de condiciones y de forma justa», explica Bruselas.
En estos momentos, este acuerdo político está sujeto a la aprobación formal del Parlamento Europeo y del Consejo. «Entrará en vigor 20 días después de su publicación en el Diario Oficial», explican las autoridades. Por otro lado, el Reglamento prevé un periodo de transición para que la industria y las autoridades se adapten a las nuevas normas.