PRIMERA DIVISIÓN / JORNADA 27

Pista libre hacia la Champions

Un golazo de Correa a los 85 minutos le da al Atlético nueve puntos de ventaja sobre el quinto

El Betis dio la cara y acabó claudicando cuando parecía que tenía un punto en la mano

Griezmann estuvo gris y el equipo echó mucho de menos a Memphis

Atlético de Madrid - Betis
Atlético de Madrid - Betis
Tomeu Maura
  • Tomeu Maura
  • Redactor jefe de Deportes en OKBaleares, 40 años en la profesión cumplidos en 2023 tras más de media vida en El Mundo

Un gol de canchero, un gol que sólo marca un buen potrero. Ángel Correa levantó un partido atascado con una jugada maravillosa y le regaló al Atlético tres puntos que le dan pista libre hacia la Champions. Son ya nueve puntos con respecto al quinto, el propio Betis, que cayó cuando parecía tener controlado el resultado y cuando Simeone había hecho dos cambios de protección para no perder el punto que tenía en la mano. Todo iba dirigido hacia el 0-0, pero nadie contó con Correa. Al Betis, desde luego, le va a costar olvidarlo.

Al Atlético la jornada le ha salido redonda. Son seis puntos de ventaja sobre la Real Sociedad, nueve sobre el Betis y diez sobre el Villarreal, además de mantener la esperanza de atrapar la segunda plaza del Real Madrid. Sin embargo por primera vez en mucho tiempo el equipo volvió a dejar dudas y evidenció lo mucho que necesita a Memphis. Sobre todo Griezmann, que en su noche más gris en lo que llevamos de 2023 añoró la simbiosis que ha sido capaz de generar con el holandés.

El partido arrancó eléctrico y valiente porque el Betis respondió al previsible zafarrancho colchonero con una audacia inesperada que le llevó a frecuentar el área de Oblak, aunque sin el acierto necesario para obligar a intervenir en la primera parte al arquero esloveno. Tuvo la ocasión de enmudecer el estadio a los tres minutos justos, en un contragolpe tres contra uno, pero Ayoze intentó una extraña vaselina que careció del menor peligro.

El Atlético se encontró con un rival que quiso mirarle de cara, pero eso no intimidó al equipo de Simeone, que aceptó el reto y le entregó el balón a Griezmann para que hiciera su magia. El francés acaparó el juego y dirigió a sus compañeros hacia posiciones de ventaja, pero sin que tampoco Rui Silva tuviera que efectuar una sola parada en el acto inicial más allá de un disparo manso del propio Antoine ante el que no tuvo ningún problema.

Privado del desequilibrio de Memphis, el equipo echó mucho de menos al holandés porque Morata carece de su movilidad. El nuevo capitán de la selección lo intentó todo, pero no pudo rematar ni una sola vez y cuando estuvo más cerca se encontró con la mano de Guido, que le desequilibró en el área sin que ni Martínez Munuera en el campo ni Mateu Lahoz en el VAR dijeran absolutamente nada. Álvaro se desesperó porque no hay forma de que le piten un penalti pase lo que pase, pero el árbitro ni se inmutó.

El resultado de todo este brebaje fue una primera parte activa pero sin chicha que obligaba a ambos a dar un paso al frente tras el descanso en busca de tres puntos que les acercaran a sus objetivos. Hacía falta arriesgar algo más y tanto Simeone como Pellegrini dibujaron escenarios alternativos en sus pizarras mentales. Lo mejor estaba por venir.

Cuatro minutos tardó el Atlético en dar el primer aviso. Tras el primer saques de esquina de la segunda parte Giménez se adelantó a la defensa y apareció en el área pequeña como un obús, pero su cabezazo lo escupió el travesaño en la primera oportunidad real de gol de la noche.

La grada acogió con esperanza el remate del uruguayo, pero lo cierto es que en contra de lo esperado el partido cayó en picado y, al contrario de lo que había sucedido en la primera parte, el balón dejó de circular por las áreas. Simeone, consciente de lo que estaba sucediendo, reaccionó de inmediato y retiró a Nahuel y Lemar para dar entrada a Correa y De Paul. Llorente se retrasó al lateral para dejarle la banda derecha libre al delantero argentino y en su primera intervención tejió un ataque que acabó con un balón franco en el área a Carrasco. El estadio se levantó en pleno para gritar gol cuando el belga armó la pierna, pero Rui Silva apareció milagroso para evitar el 1-0.

Pellegrini respondió mandando al campo a Joaquín, que lo primero que hizo fue regalarle un balón de gol a Miranda, pero el lateral remató cruzado ante Oblak para devolver el partido a la dinámica de ocasiones de la primera parte. Pablo Barrios y Juanmi se incorporaron a la fiesta y, con 20 minutos largos por delante, la noche se cubrió de incertidumbre. Cualquier resultado era posible.

Llorente fue el siguiente en intentarlo a los 71 minutos. Su disparo lo rechazó Rui Silva y Koke, atento, desvió el rebote a la red, pero partía de una posición adelantada y no hubo ni la menor discusión. Vuelta a empezar, pero cada vez con menos tiempo por delante. A los 76 minutos un centro de Luiz Henrique lo amortiguó Juanmi en el área, pero su remate se fue alto. Algo más de puntería tuvo en el 82, pero su cabezazo murió en las manos de Oblak, en su primera parada de la noche.

Witsel y Saúl completaron la nómina de cambios rojiblanca mientras Willian José reemplazó a un inédito Borja Iglesias que nunca pudo con Savic. El partido iba dirigido al 0-0 y así había que interpretar los cambios de Simeone, que no quería perder, pero cuando nada hacía pensar que la noche pudiera sufrir variaciones le llegó un balón a Correa, que salió beneficiado de un rebote ante Ruibal y luego hizo dos quiebros maravillosos en el área para acabar culminando con un disparo que acabó con la resistencia de Rui Silva. Un golazo para reivindicar la figura de un futbolista que siempre suma y que le da al Atlético tres puntos que le abren de par en par las puertas de la Champions.

 

Lo último en Deportes

Últimas noticias