Pogba antes que nadie

Su nombre está apuntado en letras muy gordas en la agenda de Zidane. Está subrayado con un marcador fosforito y tiene un monton de círculos que lo señalan. Se llama Paul Pogba y es la «prioridad absoluta» de técnico del Real Madrid para reforzar al equipo de cara a la próxima temporada en la que el equipo madridista aspirará al más difícil todavía: lograr el título en cinco competiciones.

«Primero Pogba, luego los demás», ha dicho Zidane a los dirigentes del Real Madrid. Tal como adelantó OKDIARIO el pasado 17 de marzo, en la cúpula del Bernabéu ya saben que Pogba está como loco por vestir de blanco. El mediocentro de la Juve es un viejo objetivo del equipo madridista desde hace un par de veranos, precisamente recomendado por Zinedine Zidane, hombre de confianza de Ancelotti y del presidente, Florentino Pérez.

El verano pasado Pogba estuvo cerca de venir al Real Madrid, pero la Juventus se cerró en banda a venderlo. «El año que viene hablamos», fue la respuesta que los dirigentes del club bianconero dieron a los madridistas, conscientes de que la decisión de la Vecchia Signora era traspasar el año pasado a Arturo Vidal –se lo vendieron al Bayern de Guardiola– y esperar a este verano para que Paul Pogba siguiera revalorizándose.

¿Qué ha cambiado entonces este verano para que Pogba esté más cerca que nunca del Real Madrid? Primero y fundamental: Zinedine Zidane. El papel de Zizou ha pasado de consejero a entrenador con plenos poderes, así que los nombres que pone encima de la mesa ya no son sugerencias, sino peticiones expresas. Y Zidane quiere a Pogba por encima de cualquier otro jugador.

Segundo, el propio Pogba. El jugador cree que ha terminado su ciclo en la Juventus y quiere dar el salto a un club donde pueda competir cada temporada por ganar la Champions… y aspirar a meterse en la pelea por el Balón de Oro. El mediocentro francés sabe que en el Real Madrid –que lleva seis años consecutivos en semifinales y dos títulos en tres temporadas– lo tendría más fácil que en ningún sitio.

Pero el fichaje de Paul Pogba por el Real Madrid no va a ser sencillo. La Juventus lo tiene tasado en 100 millones como punto de partida y no quiere bajar de esa cifra. Y también está el problema de su agente, Mino Raiola, que despierta recelo y desconfianza en la cúpula del Bernabéu. Pero a pesar de la Juve y de Raiola, este año la operación Pogba va más en serio que nunca. Zidane lo tiene entre ceja y ceja y el Real Madrid está dispuesto a hacer «lo que diga Zizou».