Griezmann: final en casa… ¿y a Barcelona?
Próxima estación: Lyon. Antoine Griezmann podría vivir su última final como rojiblanco. El Atlético se enfrenta este miércoles al Olympique de Marsella en la lucha por el título de la Europa League con el francés como gran protagonista. Su futuro podría estar lejos del Metropolitano, pese a los esfuerzos del club por intentar retenerle. Esta final es su gran escaparate, aunque parece que ya ha tomado una decisión.
Todos los rumores apuntan al Barcelona, que estaría dispuesto a pagar los 100 millones de euros de su cláusula de rescisión. Los azulgrana dan por hecha su llegada, como demuestran las últimas declaraciones de Suárez y Bartomeu. Pero antes de marcharse quiere seguir haciendo historia con el Atleti. Todavía no ha ganado ningún título a nivel europeo con esta camiseta y sueña con conquistar la Europa League.
Tras cuatro temporadas defendiendo sus colores, la estrella francesa enfila la recta final de su etapa como rojiblanco. Llegó en 2014 como una de las grandes revelaciones de la Liga después de una gran campaña con la Real Sociedad. De la mano del Cholo Simeone se ha convertido en uno de los mejores futbolistas del momento, incluso llegó a estar entre los tres finalistas al Balón de Oro en 2016 junto a Messi y Cristiano.
Ha ido creciendo con el paso de los años hasta ser un referente a nivel mundial. Ahora su ciclo llega a su fin y quiere despedirse de la mejor de las maneras después de un año que no comenzó muy bien. Su bajo rendimiento, con cinco goles en 14 jornadas, acompañado de las declaraciones realizadas en verano dejándose querer por el Manchester United no gustaron nada a la hinchada colchonera que le respondió con pitos en el inicio del curso.
Griezmann, de villano a héroe en un año
Durante una entrevista en su país dijo que la posibilidades de irse a los red devils era de «seis sobre diez». Otra de las declaraciones que mosquearon fue cuando dijo que «quiero ganar títulos y estoy preparado para irme». Pero la sanción de la FIFA que impedía fichar al club trastocó sus planes y tuvo que cambiar de opinión para no perjudicar al Atlético. Terminó renovando un año más y subiendo su cláusula a 200 millones de euros, que en septiembre bajaba a 100.
Tras ampliar su contrato pidió «disculpas a la gente que haya entendido mal mis palabras». Sin embargo, no le valió solo con el perdón y le llevó tiempo transformar esos pitos en aplausos. Con la ayuda de Simeone y sus compañeros y una mejora en su rendimiento la hinchada perdonó a Antoine y empezaron a ovacionarle cada vez que sonaba su nombre por la megafonía del estadio.
Con la llegada de Diego Costa sus números mejoraron notablemente y recuperó su versión más letal llega a Lyon en un buen momento. Su gol en el Emirates fue clave en la eliminatoria, ya que les daba ventaja de cara al partido de vuelta. Este miércoles tiene una nueva oportunidad de alcanzar la gloria y demostrar al Barça que vale el dinero que van a pagar por él. Será titular en la punta de ataque con el hispanobrasileño y la gran amenaza de un Atleti que sueña con alzar la Europa League al cielo de Lyon.