Los cinco momentos de Jesé Rodríguez en el Real Madrid

Jesé Rodríguez cierra una etapa en el Real Madrid que ha durado nueve años. El canario aterrizó en La Fábrica en la temporada 2007-2008 procedente del A.D. Huracán. El de Las Palmas no ha dejado de crecer y de domar su complicado carácter en todos estos años hasta alcanzar dos Champions League, un Mundial de Clubes, una Supercopa de Europa, una Liga y una Copa del Rey.

Ahora Jesé comienza una nueva etapa en París. En el PSG buscará esos minutos que no iba a tener en el club blanco para, quién sabe, si algún día volver a la que siempre será su casa. A continuación, vamos a repasar sus cinco momentos en el Real Madrid

Un carácter difícil de domar

Jesé siempre ha tenido un carácter complicado. Siempre ha estado alejado de ese modelo de canterano madridista perfecto que vemos continuamente. Jesé no es Nacho, Carvajal o Morata, Jesé es Jesé. Y es tan Jesé que en algunos momentos ha estado cerca tirar todo por la borda. 

En 2009, en un derbi cadete disputado entre Real Madrid y Atlético de Madrid su pronto le llevó a dar un cabezazo al árbitro. Fue sancionado durante 15 partidos. El Madrid, desde ese momento, no ha dejado de cuidar al futbolista más talentoso que ha dado Valdebebas en las últimas décadas. 

El gol que puso en pie a Florentino Pérez

Era el año 2013. Último partido de uno de los mejores Castilla de la historia en casa. Jesé era el máximo goleador de un equipo para la historia y mientras el primer equipo se desintegraba en la última etapa de Mourinho, muchos ya veían en ese filial la salvación.

Esa temporada el canario pulverizó el récord de otro mito madridista e ídolo, Emilio Butragueño, al anotar 22 goles en Segunda División en una misma campaña y se despidió del estadio Alfredo di Stéfano a lo grande. El atacante cogió el esférico pegado a la banda, se puso el disfraz de Maradona y se fue deshaciendo de rivales hasta terminar introduciendo el balón en la portería del Alcorcón. Florentino Pérez se puso en pie. 

En el Camp Nou se graduó

Jesé es un hombre de grandes citas. Como todos los grandes jugadores a canterano madridista le gusta destacar en los partidos donde todo el mundo mira. Por lo tanto, no podía elegir otro sitio que el Camp Nou y un Clásico para hacer su primer gol oficial en Liga con la camiseta blanca. 

El Madrid perdía 2-0 ante el Barcelona, pero Jesé no dejó de pelar. Ancelotti le dio entrada en la segunda mitad y en el 90′ se plantó delante de Víctor Valdés para recortar distancias con un gran latigazo. No valió de mucho, pero para él seguro que fue especial. 

Kolasinac y la mala suerte

Era su mejor momento. Había tirado la puerta del primer equipo como lo hacen los elegidos. Ancelotti confiaba en él y estaba llamado a ser el sustituto, nada más y nada menos, que de Cristiano Ronaldo. El italiano le dio la titularidad en la vuelta de los octavos de final de la Champions League ante el Schalke 04. El Madrid tenía una buena renta y Jesé estaba llamado a lucirse, pero todo se torció.

Era una de las primeras pelotas que tocaba Jesé en el partido cuando Kolasinac le entraba por detrás y su rodilla decía basta. «Nuestro jugador Jesé Rodríguez ha sido diagnosticado de una rotura completa del ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha», así anunciaba el club el principio del fin del jugador en el Madrid. 

Vuelta con gol

Jesé se volvió a sentir futbolista el 2 de diciembre de 2014. 259 días después de su lesión se volvió a enfundar la camiseta blanca para jugar la segunda mitad de la eliminatoria de dieciseisavos de la Copa del Rey ante el Cornellà.

El Bernabéu se puso y recibió a El Bichito con una sonora afición. Él les devolvió tanto cariño haciendo el último gol del Madrid en ese partido.