El origen del Día de la Madre, ¿por qué se celebra?
Como cada año, el primer domingo de mayo será el día en el que se celebre el Día de la Madre. Este año 2017 ha caído en domingo 7, pero seguro que no cambiará nada respecto a los años anteriores. Los hijos e hijas demostrarán el cariño que tienen a quienes les dieron la vida, ya sea con manualidades del colegio, invitándolas a comer o simplemente con un “te quiero, mamá”. Pero ¿por qué celebramos el Día de la Madre? Hoy vamos a descubrir cuál es su origen y sus tradiciones.
El Antiguo Egipto, que tantas anécdotas tiene para contar, es el punto de la historia al que nos tenemos que remontar. La diosa Isis, conocida como “Gran diosa madre”, era objeto de culto y homenaje por parte de esta civilización. Aunque los egipcios no han sido los únicos. En la Antigua Grecia, los griegos adoraban a Rea, madre de los dioses del Olimpo. Por otro lado, en el Imperio Romano era Cibeles, la diosa madre a la que adoraban.
Como podemos ver, la veneración de una figura materna que es la creadora de la vida está ligada a la historia de la humanidad. Más cercano a la actualidad, por parte del catolicismo en Europa está la figura de la Virgen María. Pero no fue hasta 1914 cuando se instauró como tal un Día de la Madre. Fue el presidente estadounidense Wilson Woodrow el que declaró oficialmente el segundo domingo de mayo como la fecha para celebrar este momento.
El Día de la Madre en España
En España, la Virgen de la Inmaculada fue la primera figura que se comenzó a asociar con este momento. Hay registros que datan de 1330 en Gerona, donde las cofradías ya rendían honor a su figura. La Inmaculada Concepción ha sido, desde hace tiempo, fiesta en España, pero el 8 de diciembre. Con la declaración de Woodrow, surgió un segundo día como tal para el Día de la Madre.
En 1965 se terminó moviendo al primer domingo del quinto mes, que tampoco está escogido por casualidad. Mayo es el mes de la Virgen María, madre de Jesús, la figura materna más importante en la religión cristiana.