¿Puede una placa funcionar flotando en el agua?

Las placas fotovoltaicas, o paneles solares como se les conoce, son una solución alternativa para la generación de energía eléctrica sustentable a partir de la energía solar. Están compuestas de una serie de celdas fabricadas, generalmente, con silicio. Tienen una gran capacidad de eficiencia energética, por lo que se las utiliza con muchos fines, desde domésticos hasta industriales. La novedad en los últimos tiempos es que estas placas pueden funcionar flotando en el agua.

Estas células solares contienen también un elemento llamado boro, el responsable de generar la carga positiva. La carga positiva se opone a la carga negativa que genera el silicio en un proceso que origina dos tipos de cargas, lo cual produce la carga eléctrica resultante. De ese modo, las células solares producen la energía eléctrica aprovechable.

Las placas fotovoltaicas flotantes son una forma relativamente nueva de producir energía renovable. Estas placas están hechas de materiales ligeros como el polietileno expandido, el poliuretano u otros materiales similares, lo que les permite flotar en el agua. Dichos materiales también están diseñados para resistir la intemperie y el agua salada, por lo que son ideales para usarse en entornos acuáticos.

Por qué instalar placas fotovoltaicas flotando en el agua

El principal motivo para instalar paneles solares flotando en el agua es el de aprovechar espacios que no pueden ser utilizados con otros fines. Las primeras experiencias fueron en China, pero ya existen algunas placas flotando en el agua en España.

En espacios que se destinan a la explotación agropecuaria, es necesario optimizar la tierra al máximo rendimiento, por eso se han confeccionado balsas con paneles solares para aprovechar la energía solar para poner en funcionamiento la maquinaria. Del mismo modo, cuando no hay otras localizaciones, se recurre a esta práctica.

Así, se han colocado en lagos, embalses y pequeños cursos de agua en las cercanías de la zona donde es utilizada la energía que producen. En algunos casos pertenecen a un solo propietario para autoconsumo. En otras situaciones se trata de comunidades de personas que necesitan energía para el riego.

Sin embargo, existen limitaciones regulatorias si el embalse no se encuentra en la propiedad privada del productor, sino en espacios de dominio público.

La materia no se encuentra completamente regulada por la legislación, con excepción del reciente Real Decreto-ley 6/2022 que atiende esta situación y habilita a colocar placas fotovoltaicas en algunas zonas acuosas de espacio público.

Qué ventajas tienen las placas flotando en el agua

Entre otras, las principales ventajas de la instalación de placas solares flotando en el agua son:

• Mayor refrigeración que ofrece el medio acuoso
• Costes menores
• Contribuye a la reducción de la evaporación del agua debido a que se la protege de la luz solar.

Hemos conocido un poco la aplicación de placas fotovoltaicas en el agua. Si te parecido interesante, ¡puedes compartirlo!

Y tú… ¿sabías que una placa puede funcionar flotando en el agua?