Bebé sufre extraña enfermedad que le hace dormir solo ¡1 hora por noche!

Cuando se tiene un hijo, los padres tienen que proceder a adaptarse a los horarios de ese en cuanto a sueño. Y es que se despertará mucho cuando está en la cuna, especialmente por la noche, y necesitará alimentarse cada pocas horas. De ahí que sea un verdadero trabajo aprender a amoldarse a esos horarios y hábitos. Sin embargo, hemos conocido la historia de unos progenitores que ya estaban desesperados y es que su bebé no dormía apenas nada. De ahí que decidieran llevarle al médico y así fue cómo descubrieron que sufre una extraña enfermedad que le hace dormir únicamente ¡1 hora al día!

¿Quieres conocer su caso? Te lo contamos a continuación:

El escenario de la historia

En la ciudad de Renfrew, en Ontario (Canadá), es donde se desarrolla este caso. Y es que es ahí donde vive la familia que ha saltado a los medios de comunicación y redes sociales por la particularidad de su historia.

Los protagonistas

Tres son las personas que podemos establecer que son las absolutas protagonistas de la actualidad debido a su caso:

• Robin Audette y Kirk Hisko, los padres que han visto cómo desde que vino al mundo su bebé el dormir se ha convertido para ellos en un verdadero lujo. Y todo porque su hija sufre una extraña patología que le afecta fundamentalmente a lo que es el sueño.
• Ever, la niña de ahora ya 3 años que tiene una patología que le impide dormir como a cualquier otra persona. Le es suficiente con 1 hora por noche.

¿Cuándo comenzó todo?

Tres años atrás, los que tiene la menor, hay que remontarse en el tiempo para encontrar el punto de origen de esta historia. Y es que fue entonces cuando vino al mundo Ever, que llenó de felicidad y a alegría a sus padres.

Nació, aparentemente, sana, sin ningún problema. Sin embargo, a las pocas semanas de vida se empezó a descubrir que algo le pasaba.

La bebé no duerme

Como hemos mencionado al principio del artículo, es normal que los recién nacidos duerman pocas horas del tirón, como se suele decir. Y eso es lo que le sucedía a la bebé. De ahí que sus padres pensaran que era lo habitual en estos casos y no se alarmaran. Es más, como la pequeña sufría problemas de reflujos, se lo indicaron al pediatra y este le indicó un tratamiento.

Los adultos pensaban que en cuanto siguieran las pautas del doctor, los citados reflujos desaparecerían y su hija podría dormir adecuadamente, así como ellos mismos. Sin embargo, no fue así. Y es que el tratamiento hizo sus efectos, acabó con el problema gastroesofágico, pero el sueño era igual. Es más, incluso llegaron a darse cuenta que Ever dormía solo una hora u hora y media por la noche, aunque eso no le impedía estar llena de energía y contenta.

Se le diagnostica una extraña enfermedad

Sospechando que había algo raro, Robin y Kirk decidieron llevar a su niña al hospital. Allí le realizaron distintas pruebas médicas y así fue cómo le diagnosticaron una extraña enfermedad que venía a dejar claro el porqué dormía tan poco.

En concreto, les indicaron que Ever padecía lo que se conoce como Síndrome de Angelman, una patología genética y congénita que, entre otras cosas, se caracteriza porque quienes la sufren tienen hiperactividad. Esto, entre otras cosas, provoca que no necesiten dormir demasiado.

Asimismo tiene otros síntomas tales como reflujos, flacidez del tono muscular, movimiento constante y excesivo de las extremidades, inestabilidad a la hora de caminar e incluso cierta discapacidad intelectual.

¿Y ahora?

Aunque no esperaban en absoluto recibir la noticia de que su hija tenía este síndrome, lo que es cierto es que los padres se quedaron algo más tranquilos en tanto en cuanto ya tenían un diagnóstico. Desde entonces, la familia lucha día a día para tener una vida lo más normal posible y para ofrecer a la pequeña la mayor calidad de vida.

¿Cómo es su rutina? El padre Kirk es el que se queda en casa cuidando de Ever mientras que la madre se marcha a trabajar a un restaurante familiar. De la misma manera, hay que subrayar que la pequeña acude a sesiones de fisioterapia y también de terapia del habla, lo que ha traído consigo que haya dados importantes avances hasta el momento. Y es que son las herramientas que existen contra esa enfermedad, ya que no tiene cura.

En lo que respecta al sueño, la menor duerme por las noches una hora, por lo que sus progenitores se han visto obligados a establecer turnos para poder descansar y cuidar de su hija al mismo tiempo. Una situación dura para esta pareja que, no obstante, afirma sentirse encantada porque su pequeña cada vez está dando más pasos importantes en pro de mejorar su día a día.