Seguir algunas modas puede afectar a nuestra salud

La moda es la manera que tenemos de comunicar nuestra manera de ser y de transmitir cómo queremos que los demás nos perciban. Tal y como lo define la Real Academia Española (RAE) es: «Uso, modo o costumbre que está en boga durante algún tiempo, o en determinado país. Gusto colectivo y cambiante en lo relativo a prendas de vestir y complementos». La moda, pues, invade la calle con propuestas de los diseñadores, marcas, prescriptores, influencers, etc. Para los expertos de la Moda Española, es juego, diversión, seguridad, profesión, arte…por eso cada persona la define en función de la perspectiva que desee darle. Pero ¿hasta qué punto seguir la moda es saludable?

Piel decorada

Llevar la piel «decorada» es una moda que puede afectar a su salud. Los tatuajes, los piercings y las escarificaciones están aumentando en los últimos años, tal y como afirman en la Fundación Piel Sana, dependiente de la Academia Española de Dermatología y Venerología (AEDV). Advierten de que estas prácticas a menudo se realizan en centros inadecuados, con malas condiciones y poca seguridad e higiene.

Los pierceing, por ejemplo, pueden ser más perjudiciales de lo que se cree. Pueden producir pequeñas reacciones alérgicas, denominadas «eczemas de contacto» o pueden tener consecuencias más graves en el organismo como son transmitir enfermedades sistémicas como el VIH, hepatitis A, B o C y producir verrugas o cicatrices anómalas.

También puede haber reacciones alérgicas en la piel por los tatuajes. Algunos pigmentos, especialmente los rojos, azules y verdes, pueden contener metales que llevan a la producción de alergias por contacto. Son casos de difícil solución ya que estos pigmentos son complicados de eliminar de la piel. Además, la situación del tatuaje también puede conllevar dificultades en el futuro, por ejemplo, los tatuajes realizados en la zona lumbar podrían impedir la aplicación de anestesia epidural en un parto. Muchos anestesistas se niegan a inyectarla por un posible riesgo de transporte de partículas a través de la médula espinal.

Vestir a la moda

El vestuario puede influir en nuestra salud tanto a nivel cardiovascular como a nivel dermatológico o muscular. La Fundación Española del Corazón (FEC) nos recuerda que para prevenir enfermedades cardiovasculares hay que seguir unos hábitos de vida saludables, lo que incluye evitar riesgos innecesarios como puede ser llevar ropa ajustada. Emplear ropa muy ceñida puede favorecer la aparición de problemas cardíacos porque se dificulta la circulación sanguínea facilitando así la aparición de trombos e incluso infartos pulmonares.

La ropa ajustada también provoca retención de líquidos, sobre todo si está fabricada con telas muy duras como los jeans. Los líquidos y las toxinas no pueden circular y se van acumulando, lo que favorece la aparición local de celulitis y de depósitos de grasa. Además, este tipo de ropa dificulta la digestión y puede obstruir el correcto paso de aire y oxígeno por el cuerpo.

Salir a la calle con ropa inadecuada también puede ocasionar problemas de salud. La moda de salir con partes de su cuerpo al aire en invierno y sin abrigo, como hacen muchos jóvenes y adolescentes, puede hacer que se sufran lesiones dermatológicas producidas por el frío como la urticaria, tal y como lo apuntan en la Clínica Mayo. Esta afección se caracteriza por un enrojecimiento de la piel con ronchas que producen picor. Aunque es una afección menor, en algunas personas puede llegar a ser grave.

En cuanto a la ropa interior, se lleva enseñar el sujetador y ponérselo muy ceñido para realzar el pecho. Un sujetador que apriete demasiado puede bloquear el sistema venoso y linfático de las mamas y provocar un edema, tal y como indican en el Canal Salud de Quirón. Lo mismo ocurre con la ropa interior que se enseña por encima del pantalón. En el caso de las prendas femeninas suelen estar hechas de material sintético y con bordados que pueden causar heridas por roce y dificultan la transpiración. Por tanto, son totalmente desaconsejables, tal y como indican en el Ministerio de Sanidad a través de su Manual Básico de Obstetricia.

En el caso de la ropa interior masculina, la moda de los calzoncillos ceñidos y visibles, puede conllevar riesgos de infertilidad. Varios estudios han demostrado que llevar calzoncillos ajustados eleva la temperatura escrotal que afecta adversamente a la función testicular disminuyendo la producción de espermatozoides tal y como indican en la web de la Organización de Reproducción Asistida.

Tacones de vértigo

El abuso de tacones altos implica forzar el antepié (dedos) lo que puede provocar fuertes dolores e incluso fracturas tal y como informan desde el Consejo General Colegios Oficiales de Podólogos de España. Además de problemas en los pies, el uso continuado de zapatos con tacón alto puede provocar dolores cervicales debido a la postura, deformaciones en los dedos como son los llamados «dedos en garra» y producir lesiones dérmicas.

Cuando se usan tacones de 10cm, la presión en el antepié se triplica lo que produce un fuerte dolor denominado metatarsalgia que son típicas del uso abusivo de este tipo de calzado. La variedad clínica de las metatarsalgias (bursitis subcapital, bursitis antecapital, síndrome de predislocación, fibrosis perineural de Morton, neuritis intermetatarsal, fractura de estrés…) puede hacer necesaria la intervención del podólogo para establecer el diagnóstico adecuado y el consiguiente tratamiento que, a veces, lleva a pasar por el quirófano.

Por eso desde el Consejo General Colegios Oficiales de Podólogos de España aconsejan alternar zapatos de tacón alto con otros bajos y en caso de querer llevar tacón a menudo, alternar lo de tacón fino con los zapatos de plataforma para descansar el pie y evitar lesiones.