Mi relación de pareja me aburre, ¿qué hago?

¿Sabes cuál es el problema más destructivo de la pareja? Acertaste: el aburrimiento. Una buena parte de las parejas que se casan se divorcia. Se acusa a la infidelidad, pero la verdadera causa es el aburrimiento, en especial en las relaciones sexuales. Cuando la novedad se termina, parece que no queda nada y el aburrimiento comienza a ocupar cada vez más lugar. “Mi pareja me aburre”, me ha decepcionado. ¿Y si eres tú el que está aburriendo a tu pareja? ¿O el aburrimiento es mutuo?  A continuación, revelaremos el misterio…  y cómo evitarlo.

¿Qué es el aburrimiento?

Para comenzar, analicemos qué es el aburrimiento. Esto permitirá descubrir si es que mi pareja me aburre o se trata de otro sentimiento. Según la psicología existen cinco tipos de aburrimiento, pero solo uno coincide con lo que comúnmente llamamos “aburrimiento”: el de tipo apático.  No hay una única definición de aburrimiento, pero la más aceptada es la que lo entiende como un estado de ánimo transitorio desagradable, caracterizado por falta de interés y dificultades para concentrarse en la actividad actual.

En realidad, es un estado de ánimo hasta positivo, ya que las personas aburridas sienten inquietud y desean orientarse hacia actividades más significativas. Por eso, frente al pensamiento “mi pareja me aburre” o “mi relación de pareja me aburre” lo que debes hacer es indagar qué ocurre realmente. ¿La magia se terminó o aburrirse es un rasgo de tu personalidad o la de tu pareja, o un problema ambiental o psicológico?

Comprobando que mi relación de pareja me aburre

Te proponemos un sencillo test para descubrir si hay aburrimiento en la pareja:

• ¿Sientes que tu pareja te exige poco o demasiado para tu capacidad?
• ¿Además sientes tristeza, ansiedad, enojo?
• ¿Te parece que el tiempo con tu pareja no pasa nunca?
• ¿Crees que lo que haces con tu pareja no tiene sentido?

Si contestaste sí a todo… ¡cuidado! Puedes estar aburriéndote de tu pareja.

Cómo combatir el aburrimiento

• Atenciones personales: el aburrimiento conduce al desinterés. Rompe la rutina dedicando a tu pareja unos minutos de atención personal. Hazle saber lo importante que es para ti. Descubre qué necesita y hazlo.
• Sexualidad: ser creativos. Lo que alguna vez funcionó hoy puede ser monotonía. No estamos diciendo aquí que se prueben nuevas posiciones o juguetes sexuales… ¿o quizás sí? Cada pareja es diferente. Dile qué te gustaría experimentar.

¿Sabías que, con solo nombrarlo, el aburrimiento comienza a desaparecer?  Tal vez tu pareja se ofenda o se enoje, o sinceramente acepte el desafío de recuperar la intimidad perdida. ¡Anímate!