Patatas adobadas en freidora de aire, ideales para los más pequeños

Las patatas son, sin lugar a dudas, uno de los alimentos más ricos que podemos disfrutar en nuestras comidas y más cuando son fritas. Son las favoritas de adultos y niños, pero también es un hecho que las frituras no son la forma más saludable de consumirlas. Sin embargo, la buena noticia es que, gracias a opciones como la freidora de aire, es posible disfrutar de las patatas como si fueran fritas, pero sin esa cantidad excesiva de aceite. Es decir, podemos disfrutar de una opción saludable, pero sin renunciar al sabor.

Además, las patatas, siempre y cuando no sean fritas, son un alimento que aporta muchos beneficios para nuestra salud general. Por un lado, se ha demostrado que las patatas son un magnífico aliado para reducir el ácido úrico porque es una gran fuente de potasio, cobre, manganeso y vitamina B. Adicionalmente, ayudan a mejorar el tránsito intestinal gracias a su alto nivel de fibra, sin contar con que también son un alimento sumamente bueno para la salud del corazón. De ahí que consumir patatas de forma regular y moderada, sea ampliamente recomendable para nuestro bienestar.

Ingredientes:

Cómo preparar las patatas adobadas en freidora de aire:

1. Lavar muy bien las patatas y pelarlas.
2. Proceder a cortarlas a gusto, aunque es recomendable hacerlo como si se tratara de patatas fritas.
3. Colocas las patatas cortadas en un bol y agregar un chorrito muy fino de aceite de oliva virgen extra.
4. A continuación, añadir a gusto las hierbas provenzales, la sal marina y la cucharadita de pimentón. Si además de estas hierbas provenzales o en su sustitución te apetecen otras hierbas o especias, no hay problema con el cambio.
5. Con las manos limpias o bien con la ayuda de una espátula, mezcla muy bien todos los ingredientes para que las hierbas, sal y aceite llegue a todas las patatas.
6. Programa la freidora de aire a 195 grados e introduce las patatas durante un tiempo aproximado de 18 – 20 minutos.
7. Transcurrido el tiempo anterior, sacar las patatas y servir calientes.

Esta receta, como puedes observar, es muy fácil de hacer, pero lo mejor es su extraordinario sabor. Se trata de una gran opción para los más pequeños de la casa, aunque también para los grandes que desean comer rico y más saludable. Es una receta ideal, con poco aceite y que nos permite disfrutar de todos los beneficios que aportan las patatas a nuestra salud. ¿Lo mejor? No debemos renunciar a su exquisito sabor porque quedan muy parecidas a cuando las hacemos fritas. Anímate a prepararlas, son fáciles, rápidas y deliciosas.