Filete lomo al ajillo: receta rápida

El filete lomo al ajillo es un plato rápido y de mucho sabor. En la práctica, una de las grandes ventajas de cocinar cerdo es que es una carne con mucho gusto. Realizar un condimento con perejil y ajo es una herencia de la población árabe que ocupó la península ibérica. Hoy en día ésta es una referencia de la gastronomía española, puntualmente con la andaluza. No es de extrañar que esta receta tenga tanto impacto en Latinoamérica. Su preparación es una de las más sencillas a pesar de ofrecer un resultado bastante completo.

El filete lomo al ajillo ha aparecido desde hace siglos en un sinfín de libros de receta españoles. De hecho, esto también pasa con los mariscos y el pollo condimentados también a partir de esta mezcla. Por ello, existen muchas formas e ingredientes para acompañar este condimento y mejorar el sabor de diversas carnes. Lo esencial de esta receta es triturar el ajo y el perejil juntos, ofreciendo un poco de cocción con aceite o mantequilla.

Con respecto al cerdo, ahora se conoce que es una carne muy grasosa y debe consumirse de forma esporádica. No obstante, el lomo es la parte mas magra de este animal y por ello, la más recomendable para el consumo. Este corte ofrece proteínas de alto valor, destacando por su aporte en vitamina B, magnesio, fósforo y potasio. A continuación, verás porque tantas personas optan por esta receta cuando necesitan realizar un almuerzo delicioso y rápido… ¡Sigue leyendo!

Ingredientes:

Cómo preparar un filete lomo al ajillo:

1. Cortar los filetes de cerdo y embadurnar con un poco de aceite de oliva.
2. Triturar tres dientes ajos y el perejil con ayuda de un mortero.
3. Calentar la plancha y lanzar sal gruesa en ella.
4. Sofreír la mezcla del perejil con el ajo en una sartén con aceite de oliva durante dos minutos.
5. Remover el ajillo y reservar.
6. Cocinar los filetes de cerdo en la sartén con los cinco ajos restantes durante unos dos minutos.
7. Voltear el filete y cocinar otros dos minutos más por el otro lado.
8. Colocar los filetes en un bol e incorporar el ajillo que se había reservado. Salpimentar.

Siempre es posible añadir un poco más de ajo para lograr un sabor más concentrado. También es factible agregar un poco de vino blanco o zumo de limón.