Pechuga de pollo a la plancha

Una carne muy fácil de comer, que no aporta nada de grasa, aunque a algunos comensales les parece una carne carente de jugosidad. No obstante, hay diferentes técnicas para conseguir un perfecto acabado, y una de ellas es la del marinado.

Propiedades nutricionales del pollo

Es sabido que las carnes son una excelente fuente proteica, no solo por su cantidad de proteínas, sino por su calidad. Una buena referencia es el análisis de aminoácidos esenciales, aquellos que nuestro cuerpo sintetiza con facilidad.

La pechuga de pollo nos aporta todos los aminoácidos, y es una proteína de excelente calidad. Entre las características que hacen que el pollo sea parte de nuestra alimentación diaria, es la sensación saciante. Comer pollo nos genera la sensación de estar llenos durante varias horas (no ocurre lo mismo con otros alimentos, como es el caso del pescado).

El pollo es un alimento con mucho aporte en nutrientes, por lo que es recomendado para personas enfermas; las proteínas que contiene se digieren de una forma sencilla, no causan una sensación de pesadez, y alimentan nuestro cuerpo.

Receta de pechuga de pollo a la plancha

Ingredientes:

1 pechuga de pollo de tamaño mediano

Un chorrito pequeño de aceite

Sal

Pimienta molida u otras especias, al gusto

Un mazo de cocina de madera para aplanar (sirve también un frasco de cristal)

Sartén antiadherente, con su tapa

 

Elaboración:

1. Golpear la pechuga con el mazo, por todas sus partes, hasta conseguir que sea un filete alargado y atractivo.
2. Salar la carne y aportar los condimentos y especias que se hayan elegido.
3. Calentar la sartén a fuego vivo, con un poquito de aceite.
4. Al estar el aceite caliente, pero no demasiado humeante, echar los filetes de pechuga. Se trata de sellar la carne, dorarla de pronto; no es necesario tenerla demasiado tiempo por cada lado, bastará con medio minuto.
5. Tapar la sartén o cazuela, bajar un poco el fuego y dejar que se cocine durante diez minutos sin abrir la tapadera.
6. Una vez pasados los diez minutos, apagaremos el fuego y dejaremos que la carne de pollo repose durante otros diez minutos sin destapar, con el calor residual y el vapor.
7. Al abrir e ir a servir, se puede rectificar el punto de sal y de gusto.
8. Hay muchas ideas de marinadas para las pechugas de pollo. Una de ellas es tener la carne durante unas horas en una mezcla de mostaza, limón y miel, a la que se pueden agregar algunas especias.