Sánchez impedirá a Lobato ser el candidato y piensa en Jalloul y Castellanos como rivales de Ayuso

Juan Lobato ganó hace dos semanas las primarias del PSOE de Madrid convirtiéndose así en el secretario general del PSM. Su intención, de cara a las elecciones regionales de 2023, es ser también el presidenciable relevando al dimitido Ángel Gabilondo. Pero Pedro Sánchez no se lo va a permitir. El líder socialista quiere que la persona que rivalice contra Isabel Díaz Ayuso en las urnas sea una mujer.

Aunque todo apuntaba a Hana Jalloul como candidata a las elecciones de 2023, desde el entorno de Sánchez ya no dan tan por seguro que eso vaya a ser así. Pese a la promoción que ha recibido, ascendiéndola como portavoz en la Asamblea tras la marcha de Gabilondo -cargo que ahora podría perder en pro de Lobato- y su entrada en la Ejecutiva Federal, todos coinciden en que Jalloul «no tiene perfil político». Y «aunque tiene dos años para bregarse» nada hace prever que en este tiempo «sea capaz de aprender como para medirse a Ayuso».

Con la candidatura de Jalloul perdiendo fuerza y la negativa de Sánchez a que un perfil masculino como el de Juan Lobato encabece la candidatura, otro nombre en ascenso en el PSOE asoma la cabeza. Se trata de la ex directora de gabinete adjunta de la Presidencia, ahora secretaria federal de Relaciones Institucionales del PSOE, Llanos Castellanos. Desde la crisis de gobierno del pasado mes de julio y hasta su salida de Moncloa hace una semana, Castellanos se ha convertido en una de las personas de mayor confianza de Sánchez. Y ve en ella una buena candidata.

En el PSM recelan del nombre de Castellanos como en su día lo hicieron con la «imposición» de Jalloul en la lista de Ángel Gabilondo. La federación madrileña, que ahora abre una nueva etapa con Juan Lobato al frente, se queja habitualmente de las «injerencias» de Ferraz y la «falta de autonomía» a la hora de tomar decisiones propias. Los socialistas de Madrid reclaman «decidir quién debe representarnos en las instituciones». En definitiva, no quieren que la mano de Sánchez pase por encima de los militantes.

Y es que las últimas apuestas del presidente del Gobierno han sido un fracaso. El tándem Gabilondo-Jalloul pasó de ser la primera a la tercera fuerza política en la Asamblea de Madrid. El alcaldable Pepu Hernández, ya dimitido, logró uno de los peores resultados del PSOE en el ayuntamiento de la capital. El nombramiento de Hana Jalloul como portavoz no está consiguiendo que el PSM al PSM recupere terreno electoral ante un Más Madrid cada vez más crecido.

Ante el mal resultado que los nombres impuestos por Sánchez en las últimas elecciones madrileñas han provocado, el PSM reclama «manos libres» para hacer las listas electorales. Pero todo indica que, una vez más, será una lucha perdida por la federación madrileña. El secretario general del PSOE, en el pulso que mantiene con Díaz Ayuso, hace de la Comunidad de Madrid su batalla personal. Y a principios del año que viene quiere dar a conocer un nombre, sea Jalloul o Castellanos, para que los votantes empiecen a verle como relevo de la presidenta actual. Lo mismo pasará en el Ayuntamiento de Madrid, donde sí dará más capacidad de decisión al líder del PSM.