Madrid se prepara para la nieve: las carreteras afectadas, dónde están y qué hacer
Este año, hay 230 quitanieves en la Comunidad de Madrid
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La Comunidad de Madrid ha implementado el Plan de Coordinación de Actuaciones ante Situaciones de Nevadas 2024-2025, reforzando recursos para prevenir problemas en la circulación debido a las nevadas. Este plan, que hasta el 1 de abril de 2025, incluye más agentes de la Guardia Civil y quitanieves, además de una mayor disponibilidad de sal y salmuera para prevenir la formación de hielo en las carreteras. Entre las medidas más destacadas se encuentran la incorporación de 230 quitanieves, cuatro más que el año pasado, y 180 vehículos especializados para distribuir más de 2 millones de litros de salmuera y 22.000 toneladas de sal. Estos recursos están estratégicamente ubicados en 28 plantas para garantizar una respuesta rápida en caso de condiciones adversas.
Asimismo, el despliegue incluye a 735 agentes de tráfico de la Guardia Civil, 50 más que en la campaña anterior, con vehículos adaptados para intervenir ante nieve, hielo, lluvias intensas o granizo. El plan también identifica puntos críticos en la red viaria, como los accesos a Madrid, las vías de circunvalación, el aeropuerto de Barajas, y puertos de montaña como Somosierra (A-1) y el Alto del León (N-VI), donde se concentra especial atención por su propensión a nevadas. En esencia, este dispositivo busca garantizar la seguridad y movilidad en los 900 kilómetros de red vial de la región.
Plan de Coordinación de Actuaciones ante Situaciones de Nevadas
La Comunidad de Madrid ha diseñado un robusto plan para prevenir los problemas de tráfico que puedan surgir durante el invierno debido a las nevadas. El Plan de Coordinación de Actuaciones ante Situaciones de Nevadas 2024-2025, en vigor desde el 1 de noviembre de 2024 hasta el 1 de abril de 2025, incluye un incremento de recursos y personal respecto a años anteriores. Entre las medidas, destacan la incorporación de 230 quitanieves (cuatro más que el año pasado), 180 vehículos especializados y el almacenamiento de más de 22.000 toneladas de sal y 2,2 millones de litros de salmuera, distribuidos en 28 plantas estratégicamente situadas en la región.
Este plan también cuenta con la participación de 735 agentes del Sector de Tráfico de la Guardia Civil, 50 más que en la campaña anterior. Los agentes dispondrán de vehículos adaptados para actuar ante nevadas, hielo o lluvias intensas en los 900 kilómetros de carreteras bajo la jurisdicción estatal en Madrid. Además, se ha ampliado la información en paneles de carreteras, y se han habilitado 29.739 plazas para estacionamiento obligatorio de camiones en caso de restricciones, junto con 101 puntos de control de circulación.
Áreas prioritarias y puntos críticos
El objetivo del plan es garantizar la seguridad y la movilidad en los accesos clave a Madrid, como las circunvalaciones, radiales, entradas al aeropuerto de Barajas y estaciones de transporte. También se prestará especial atención a zonas propensas a nevadas intensas, como el puerto de Somosierra en la A-1 y el Alto del León en la N-VI, ambos situados a más de 1.400 metros de altitud.
Fases de actuación
El plan se estructura en tres fases: alerta, preemergencia y emergencia, determinadas según los niveles de aviso de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). En la fase de alerta, se activan los recursos tras un aviso meteorológico de riesgo elevado. La preemergencia se despliega con la llegada de nevadas fuertes, previendo el uso de quitanieves y el control del tráfico. Finalmente, la emergencia se declara cuando el hielo o la nieve bloquean carreteras, requiriendo atención inmediata para evitar incidentes.
Recursos tecnológicos y coordinación
Entre los recursos tecnológicos, se activarán aspersores automáticos de fundentes en tramos críticos, como el acceso al Bus-VAO en Las Rozas. Además, se han mejorado las herramientas informativas para conductores, como paneles y aplicaciones digitales, lo que permite a los usuarios tomar decisiones más seguras. En situaciones extremas, se cuenta con el apoyo de la Unidad Militar de Emergencias (UME), que puede colaborar con otros cuerpos de seguridad.
Preparación ante fenómenos extremos
Aunque en el invierno pasado no fue necesario activar el protocolo debido, el nuevo plan busca minimizar los riesgos y garantizar la conectividad, incluso en condiciones climáticas adversas. En definitiva, el Plan de Coordinación 2024-2025 refuerza de manera significativa la capacidad de respuesta de la Comunidad de Madrid ante los retos del invierno, aumentando los recursos y optimizando la planificación para enfrentar fenómenos meteorológicos adversos como nevadas intensas, hielo o lluvias persistentes.
Este enfoque busca garantizar la seguridad de los ciudadanos y proteger la infraestructura clave de transporte y mantener la conectividad en una región estratégica. La implementación de un protocolo dividido en fases (alerta, preemergencia y emergencia) asegura que las respuestas sean oportunas y adecuadas según la gravedad de la situación climática. La coordinación entre distintos organismos, como la Guardia Civil, la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) y la Unidad Militar de Emergencias (UME), es esencial para optimizar la gestión de recursos y minimizar los impactos.
De esta manera, la región demuestra su capacidad para adaptarse y anticiparse a las inclemencias climáticas, promoviendo una movilidad segura y sostenible en cualquier circunstancia.