Temporal Filomena

UME y Guardia Civil preparan una operación para escoltar a los convoyes de la vacuna por España

Ver vídeo
Pelayo Barro

La borrasca Filomena, el mayor temporal de nieve que ha asolado a España en el último medio siglo, ha colapsado el país y amenaza con obstaculizar el reparto de las 350.000 dosis de la vacuna del coronavirus que se distribuyen cada semana en todas las comunidades autónomas. El Gobierno ha encargado a los ministerios de Defensa e Interior que diseñe una operación para escoltar a los convoyes de camiones que actualmente se encuentra embolsados. Serán efectivos de la Unidad Militar de Emergencias y de la Guardia Civil los que se hagan cargo de la misión.

De nuevo, los militares y los guardias civiles al rescate. Esta vez el Gobierno les ha encomendado una misión de especial relevancia: conseguir que la vacuna contra el Covid llegue a tiempo y en condiciones a los puntos de vacunación de toda España. La campaña de inmunización de la población de mayor riesgo -los mayores de las residencias y el personal que les atiende- no puede frenarse pese al colapso del temporal.

Según ha podido saber OKDIARIO de fuentes militares involucradas en el diseño de esta operación, tanto la UME como la Guardia Civil serán los encargados de acompañar y prestar apoyo a los convoyes de camiones que circularán por España para transportar la vacuna, alimentos básicos y medicinas.

El objetivo del Gobierno es evitar el desabastecimiento a pesar de que las intensas nevadas que han colapsado miles de kilómetros de carreteras pronto se convertirán en hielo. El tiempo apremia, por ello, explican, se ha activado toda la flota de quitanieves disponible para despejar las vías y permitir el paso de los más de 2.000 camiones que permanecen embolsados en diversas áreas de servicio del centro de la península. Especialmente en la A-6 a la altura de Arévalo (Ávila) y en la A-1 en la provincia de Burgos.

Abriendo camino

El operativo, que aún está ultimando su fase de diseño, involucrará a las quitanieves y vehículos ligeros de la UME, así como a todoterrenos de la Guardia Civil y de sus Agrupaciones de Tráfico. Las quitanieves abrirán camino a los convoyes, que circularán acompañados en todo momento de vehículos militares que, llegado el momento, podrán actuar en caso de que se encuentre algún obstáculo que impida transitar a los camiones o alguno de ellos quede atrapado en hielo.


«A partir de mañana queremos activar el desembolsamiento de los camiones para garantizar que el abastecimiento de los servicios esenciales no sufra ningún daño», aseguró el sábado el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, anunciando la prioridad del Gobierno una vez que se ha conseguido liberar a los conductores atrapados -más de 1.500- y se han limpiado los accesos más importantes a hospitales y centros logísticos de farmacia.

La operación para asegurar los convoyes de transporte comenzará este domingo y se espera que se alargue varios días. De momento, más de 2.000 camiones se encuentran aparcados temporalmente en áreas de servicio a la espera de la autorización para circular. Los primeros, explican fuentes militares, comenzarán a moverse entre el mediodía y la tarde del domingo. Desde que el pasado sábado quedaron inmovilizados, la Cruz Roja ha estado suministrando a los conductores mantas, comida y agua para que resistan hasta que puedan volver a la carretera con un mínimo de seguridad.

Despejados hospitales y Barajas

Por otra parte, efectivos de la Unidad Militar de Emergencias han estado trabajando durante la tarde del sábado, la noche y hasta primera hora de la mañana del domingo en desatascar las vías y arterias principales de Madrid. Las quitanieves de la UME han limpiado de arriba a abajo la nieve que colapsaba el Paseo de la Castellana, en una imagen para la historia.

Fue al mediodía del sábado cuando el alcalde de la capital, José Luis Martínez Almeida, llamó a la titular de Defensa, Margarita Robles, para trasladarle que la situación en la ciudad era muy crítica y requerir el auxilio de los militares. Tal y como adelantó OKDIARIO, la respuesta de Robles fue positiva y las unidades de la UME pusieron rumbo a las calles del centro de Madrid.

Además, tras el cierre de las operaciones en el aeropuerto de Barajas, un equipo de la UME formado por 86 militares y 32 vehículos se desplazó en medio de la tormenta hasta las pistas madrileñas para comenzar a liberarla de nieve y desatascar las aeronaves que habían quedado sepultadas bajo las precipitaciones. Se espera, según el Ministerio de Transportes, que el aeropuerto pueda recuperar cierta normalidad a lo largo de este domingo.

Pero si ha habido un punto especialmente sensibles de las operaciones de la UME, ese han sido los hospitales. Los equipos de rescate militares han actuado en las zonas de acceso de todos los centros hospitalarios de referencia de la capital y de otras partes de la Comunidad, abriendo corredores seguros para el acceso de los vehículos de emergencia que trasladaban heridos, embarazadas o enfermos de urgencia.

Mientras esas vías aún no habían sido desatascadas, los miembros de la UME han estado trasladando a pie a los enfermos que llegaban hasta los centros hospitalarios.

Lo último en España

Últimas noticias