El Gobierno pide a los ciudadanos que se queden en casa con España colapsada por su falta de previsión

El Gobierno hace un llamamiento a todos los ciudadanos para que no salgan de sus domicilios hasta que amaine el temporal Filomena, que está dejando las mayores nevadas registradas en el último medio siglo. La intensidad de la borrasca se conocía desde hace días, pero la acción y los preparativos del Gobierno han sido insuficientes para evitar el colapso de buena parte del país. El temporal «ha desbordado las previsiones más pesimistas» del Ejecutivo.

El caos que iba a provocar el temporal de frío polar Filomena se veía venir. Las previsiones de los expertos apuntaban a una borrasca histórica, de una intensidad casi sin precedentes en la historia moderna de España. Sin embargo, los medios preparados por el Gobierno para la ocasión han resultado claramente insuficientes, en vista de la situación en la que se encuentra el país: aeropuertos como el de Barajas cerrados, más de 400 carreteras y autopistas cerradas por falta de quitanieves, miles de conductores atrapados, servicios ferroviarios anulados y dificultades para el abastecimiento de tiendas  y supermercados.

La respuesta principal del Gobierno este sábado ha sido pedir el autoconfinamiento de la población, una solución similar a la que ha venido recomendando durante las fases más dura de la crisis sanitaria del coronavirus. El ministro de Transportes, José Luis Ábalos, ha pedido a los ciudadanos que permanezcan en sus domicilios y eviten cualquier desplazamiento porque, según advierte el Gobierno, «la situación es grave».

Evitar desplazamientos

Ábalos ha trasladado esta advertencia en rueda de prensa en la Delegación del Gobierno en Madrid junto al titular del Interior, Fernando Grande-Marlaska, que ha instado también a los españolas a que prescindan de los desplazamientos a no ser que sean «absolutamente inevitables». La previsión del Gobierno es preocupante: las temperaturas van a bajar más aún en las próximas horas, provocando que lo que ahora es nieve se termine convirtiendo en hielo. El riesgo de accidentes aumentará considerablemente.

Según los datos ofrecidos por el ministro, los técnicos de mantenimiento de carreteras han movilizado 1.305 equipos de quitanieves en España y se han consumido «en solo dos días» 220.000 toneladas de fundente, principalmente sal y salmuera. Supone el 30 por ciento de todo lo que se utilizó para las nevadas del año pasado.

«Ha sido el dispositivo mas ambicioso de la historia», ha asegurado Ábalos, aunque ha reconocido que la magnitud de la borrasca ha sido mayor de la que se esperaba.

El Gobierno se defiende

El Gobierno ha mostrado su profunda inquietud por la situación que la borrasca Filomena está provocando en todos los puntos de España, pero especialmente en el centro del país. El ministro de Transportes, Agenda Urbana y Movilidad, José Luís Ábalos, ha reconocido este sábado que la virulencia de la nieve «ha sorprendido» al Ejecutivo. El titular del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha defendido en cambio que la respuesta que han dado ha sido «adecuada» y ágil, tratando de evitar entrar a valorar las críticas contra el Ejecutivo por su imprevisión.

Según Ábalos, “la situación es excepcional y ha desbordado las previsiones más pesimistas” con las que contaba el gabinete que preside Pedro Sánchez, cuyo único mensaje ha sido una publicación en Twitter pidiendo a la gente que se quede en casa.

El ministro de Transportes afirma que la prioridad, ahora mismo, es auxiliar al 30% de los conductores que siguen atrapados en sus vehículos o en transportes colectivos. Miles de conductores siguen atrapados en diferentes carreteras del Estado y en infraestructuras aéreas y ferroviarias, completamente cerradas desde ayer, a excepción del servicio de mercancías. Ábalos reitera que «hay que garantizar la seguridad de todos los ciudadanos y el abastecimiento de productos básicos a las zonas más afectadas».

1.500 rescates

En las últimas 24 horas, según han informado los ministros, los servicios de emergencia han tenido que actuar en varias zonas de la Comunidad de Madrid para rescatar a personas que se habían quedado atrapadas en sus vehículos. En total, en varias carreteras del centro del país, han sido rescatadas casi 1.500 personas del interior de sus coches desde la tarde del viernes. En este sentido Ábalos avisa que «entraremos en una situación quizá más peligrosa todavía que la que tenemos ahora mismo».

Fernando Grande-Marlaska, por su parte, asegura que se está cumpliendo con el dispositivo de seguridad y prevención que se activó el miércoles ante las previsiones de la AEMET. Dice el ministro del Interior que el “número de incidentes está siendo relativamente limitado”, pese a las cuatro víctimas mortales que la borrasca ya se ha cobrado en todo el país. Avisa Marlaska que «quedan por delante horas difíciles, hay que extremar la precaución”.

El principal responsable de la Seguridad defiende que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, así como la Unidad Militar de Emergencias, han respondido con diligencia. Marlaska recuerda que «la UME se despliega a petición de las Comunidades Autónomas, que tienen que pedir que se movilice». Según él, una vez eso se ha producido, Interior lo ha propuesto y Defensa la ha activado.