Gobierno

PSOE y Podemos pactan «callar» sus discrepancias en los actos conjuntos para rebajar la tensión

El objetivo de los socios de coalición es evitar el cruce de reproches en público de los ministros tras los ataques de Podemos

Sánchez desafía a Podemos con una visita a las tropas de España en la frontera con Rusia

Yolanda Díaz se desmarca de Podemos sobre el envío de armas a Ucrania: «Sánchez tiene nuestro apoyo»

empoderamiento climático
Reunión del Consejo de Ministros de Pedro Sánchez. (Foto: Moncloa)
Joan Guirado

Este martes la portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, impedía a Irene Montero responder a una pregunta que le formulaban sobre a qué organizaciones considera Podemos «los partidos de la guerra». Fue al término del Consejo de Ministros y amparándose en que «aquí respondemos en nombre del Gobierno». La ministra de Política Territorial emplazaba a la titular de Igualdad a dar respuesta en otro espacio, «como dirigente de Podemos que es». Todo estaba pactado, según dicen ambas partes.

El acuerdo alcanzado entre los dos socios de gobierno, que suscribieron Pedro Sánchez y Yolanda Díaz el pasado lunes, y que rubricaron el martes todos los miembros del gabinete en la reunión semanal del Consejo de Ministros, pasa por «callar» las discrepancias que tengan socialistas y podemitas en los foros que compartan como actos o ruedas de prensa. Una decisión que busca básicamente rebajar la tensión y evitar que los ataques directos que puedan lanzarse provoquen un cruce de reproches entre compañeros.

En definitiva, que puedan criticarse como hasta ahora, pero no a la cara. Socialistas y podemitas se han conjurado para seguir conviviendo juntos en el gobierno de coalición por lo mucho que se juegan. Aunque sea a base de desconfianzas, deslealtades y ataques a medida. Hasta que acabe la legislatura la tónica será similar a la actual.

Un PSOE marcando la agenda en el ámbito económico e internacional, los dos frentes que predominarán en la política española, y un Podemos intentando desmarcarse continuamente de sus socios para que su participación en el gobierno no les arrastre aún más a la residualidad política.

Sánchez y Belarra siguen sin hablar

Pese a lo sucedido esta semana, que colocó a la coalición en uno de los choques más fuertes de la legislatura, con acusaciones directas por parte de Ione Belarra al PSOE de ser «el partido de la guerra», aunque luego negasen referirse a sus socios, la líder de Podemos y el presidente del Gobierno siguen sin hablar. Ya avanzó hace unos días OKDIARIO que los líderes de los dos partidos llevaban desde septiembre, cuando se negociaron los presupuestos sin reunirse, y varias semanas sin descolgarse el teléfono o hablar en persona.

El lunes, en el marco del acto institucional del 8 de marzo, Pedro Sánchez sí habló con la ministra de Igualdad, Irene Montero. Pero fue sobre el funcionamiento de esa actividad. Allí también estaba la ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra, con quién Sánchez no se cruzó ni una palabra. Es más, a la hora de la foto, la secretaria general de Podemos se saltó el protocolo institucional y se colocó a un extremo para no estar cerca del jefe del Ejecutivo. Lo que evidencia que la relación entre ambos está prácticamente rota, aunque condenados a convivir.

Belarra, con vestido morado, en el extremo izquierda de la foto y Sánchez con Irene Montero más centrado.
Belarra, con vestido morado, en el extremo izquierda de la foto y Sánchez con Irene Montero más centrado.

Lo último en España

Últimas noticias