Montero impone por ley su «pedagogía feminista» en las aulas tras defender el indulto a la roba-niños
La ley del sólo sí es sí, el proyecto estrella de Irene Montero, ha recibido este jueves el impulso decisivo del Congreso de los Diputados -gracias al apoyo de los partidos del Gobierno y sus socios- para seguir su tramitación parlamentaria. El Congreso ha votado el dictamen de la Comisión de Igualdad sobre la ley orgánica de garantía integral de la libertad sexual sobre el que se articulará la ley definitiva. En el mismo, al que ha tenido acceso OKDIARIO, se incorporan algunas novedades con respecto al proyecto inicial, como el concepto de «pedagogía feminista» que Montero pretende imponer en todas las etapas del sistema educativo.
Así se expone en el capítulo dedicado a las medidas «de prevención y sensibilización». En concreto, en lo referido al ámbito educativo se determina que «el sistema educativo español incluirá, dentro de sus principios de calidad, la integración de contenidos basados en la coeducación y en la pedagogía feminista sobre educación sexual e igualdad de género y educación afectivo-sexual para el alumnado». Estos contenidos, se dice, serán «apropiados en función de la edad, en todos los niveles educativos y con las adaptaciones y apoyos necesarios para el alumnado con necesidades educativas específicas». El texto inicial no incluía esa alusión.
Montero impone así en las aulas su visión ideológica de la igualdad tras sus polémicas declaraciones en favor del indulto a María Sevilla, presidenta de Infancia Libre que fue condenada a dos años y cuatro meses de prisión por un delito de sustracción de menores. Montero, que se ha referido a Sevilla como «madre protectora», ha calificado como «patrimonio del movimiento feminista de este país» la concesión de la medida de gracia.
Cabe recordar que la mujer retuvo durante más de un año a su hijo menor de edad y mantuvo oculto su paradero para evitar entregarlo a su padre, que tenía otorgada la guardia y custodia desde finales de 2017. Sevilla alegaba haber actuado para proteger a su hijo de su ex pareja, Rafael Marcos, de quien decía que había abusado sexualmente del menor. Una grave acusación cuyos hechos, sin embargo, la justicia no ha considerado probados. Los tribunales, sin embargo, sí consideraron acreditado que María Sevilla cometió un delito de sustracción de menores.
Pese a ello, según Montero, Sevilla es una «madre protectora» que «sufre injustamente […] la criminalización y la sospecha por parte de la sociedad». Y, por ello, es «importante que el Estado salde la deuda» con estas madres.
Medidas
La polémica ley del sólo sí es sí recoge medidas controvertidas, como el consentimiento de la mujer para mantener relaciones sexuales. La norma ha recibido el rechazo del Consejo de Estado, el Consejo General del Poder Judicial y el Tribunal Supremo, al considerar que la definición de consentimiento suponía una vulneración de la presunción de inocencia.
El texto recoge una nueva definición de consentimiento que señala que «solo se entenderá que hay consentimiento cuando se haya manifestado libremente mediante actos que, en atención a las circunstancias del caso, expresen de manera clara la voluntad de la persona». La norma también reforma los delitos sexuales fusionando abuso y agresión sexual como un solo delito tipificado en el Código Penal y considera todos los tipos de violencias contra las mujeres (el acoso callejero, el exhibicionismo, los matrimonios forzados y la mutilación genital femenina, entre otros delitos) como violencias machistas.
La ministra de Igualdad ha señalado en el debate que la norma sale adelante a pesar de la «Justicia patriarcal», en un nuevo ataque a los jueces, y, en este sentido, ha apuntado que el Estado «tiene una deuda con las madres protectoras». En este contexto, ha señalado que el Gobierno de coalición va a hacer lo posible por proteger a estas mujeres que, a su juicio, están «defendiéndose a sí mismas y a sus hijos de la violencia de sus maltratadores».