La Convención del PP recorrerá toda España hasta diciembre para sumar más voces al proyecto de Casado

La Convención nacional que el Partido Popular celebra durante toda esta semana no concluye en Valencia. Aunque el cónclave popular, estratégico para apuntalar el proyecto de Pablo Casado, pondrá un broche este domingo, no será más que un punto y seguido. Tras varios días de ponencias y debates, la dirección de Génova se desplegará por toda España para explicar las conclusiones de la Convención e ir esbozando las ideas clave del programa que Casado llevará a las próximas generales. En esta tarea se implicarán directamente todos los vicesecretarios, con actos sectoriales por distintos puntos del país que se alargarán hasta diciembre, explican fuentes de la cúpula del PP.

Queda por delante, pues, una intensa actividad programática para el partido. Aunque la Convención servirá para avanzar los primeros trazos de la alternativa al Gobierno socialcomunista, el documento final será el resultado de profundas reflexiones y debates, abiertos a expertos y a la sociedad. Con los sondeos de cara, Génova quiere el contacto directo con los ciudadanos, escuchar nuevas voces. Ensanchar el partido, en definitiva. Es la idea matriz que vertebra una Convención que tiene como fin consolidar a Casado como referente del centroderecha español.

Condensar todos esos mensajes en el programa de la Convención itinerante que se viene celebrando durante toda esta semana ha sido una tarea ardua. Pero en Génova definen como «éxito rotundo» el transcurrir de su gran cita nacional. Durante estos días, el PP ha desplegado en varias mesas por distintas ciudades españolas -Santiago de Compostela, Valladolid, Madrid, Sevilla, Cartagena y, finalmente, Valencia- sus mensajes estratégicos: «Libre mercado y propiedad privada», «nación y sociedad abierta», «libertad y responsabilidad individual», «Estado de Derecho y seguridad» e «igualdad de oportunidades y bienestar».

Se trata de los cinco pilares en los que Casado basó su contrato político al ganar las primarias del PP. El propio líder popular defendió este miércoles esos cinco «principios liberales que han vertebrado Europa y la han convertido en el mayor espacio de libertad, paz y prosperidad». «Cuando hemos estado separados de nuestros principios, el rédito electoral siempre ha sido menor, mientras que cuando hemos sido fieles a ellos, los ciudadanos nos lo han agradecido», señaló durante su intervención en la jornada celebrada en Madrid. Casado reivindicó el proyecto alternativo del PP frente a los populismos, comunismos y nacionalismos -a los que acusó de «sectarios y supremacistas»- que intentan acabar con las sociedades abiertas y que gobiernan con «mantras dogmáticos de ideologías trasnochadas».

Mensaje de unidad

La Convención pretende servir además para mostrar una fotografía de cierre de filas con Pablo Casado. Génova quiere reivindicar el papel de su organización territorial como una de las grandes claves para poner rumbo a La Moncloa. La jornada de este miércoles en Madrid ha permitido por ejemplo acallar a quienes decían que Ayuso boicoteaba el cónclave: todos sus consejeros acudieron en pleno para arropar a Casado. La presidenta madrileña ha modificado además la agenda de su viaje en EEUU para poder estar ya el sábado en Valencia, donde participará en una mesa con el resto de dirigentes autonómicos.

La cúpula nacional ha contado también con los ex presidentes Mariano Rajoy y José María Aznar a quienes, como avanzó OKDIARIO, se les ofreció participar en los distintos actos previos al cierre valenciano. Rajoy lo hizo el lunes en la apertura en Santiago de Compostela y Aznar lo hará este jueves en Sevilla. En ambos casos, en dos charlas con Casado: Rajoy sobre «progreso y empleo» y Aznar sobre «la fortaleza de las instituciones».

Casado se ha visto arropado además por varios líderes europeos, entre ellos -uno de los platos fuertes de la Convención- el ex presidente francés, Nicolás Sarkozy, quien exhibió sin tapujos su simpatía hacia el dirigente del PP. «Hace 11 años, la primera vez que le vi en el Elíseo le dije: ‘Un día serás presidente del Gobierno de España’», proclamó en su intervención.  Un día antes, el ex presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, definió a Casado como «la esperanza de la política europea» y le instó a ganar las elecciones «por el bien de España y por el bien de Europa».

En Génova celebran además haber recolocado en la agenda temas «que parecían vetados» a la derecha, como el feminismo. También que se «escuche alto y claro» a las víctimas del terrorismo frente «a las cesiones de Sánchez a Bildu». En el ámbito económico destacan, asimismo, que «el mensaje de Rajoy a Casado de que ‘no hay dos sin tres’ fue especialmente potente».

El entusiasmo se ve además correspondido con el amplio apoyo de la militancia. El partido se prepara para exhibir músculo en el cierre en Valencia, donde «los espacios se están quedando cortos». Cabe recordar que el gran colofón será en la Plaza de toros, un lugar emblemático. Los populares esperan congregar allí a más de 9.000 personas.