Las alternativas en el sector inmobiliario

Vivienda
Bloques de viviendas

El sector inmobiliario ha sufrido, en los últimos años, un retroceso importante después de que reventara la burbuja en la cual había entrado. Los precios estaban muy por encima de lo que se podía permitir el mercado y se había inflado, de forma superficial, la dotación de hipotecas sin garantías ni seguridad real de pago. Todo ello iba provocando un incremento de la demanda paralelo al de los precios.

Como consecuencia, los precios han bajado de forma importante. Ahora bien, parece que esta situación de descenso continuado ha frenado y que, especialmente en las principales ciudades, los precios están volviendo a subir. Igualmente, la experiencia anterior debe hacernos entender los grandes riesgos de volver a entrar en una espiral parecida a la que vivimos hace muy poco tiempo en el sector inmobiliario.

Nos encontramos, en cierto modo, en una situación “ficticia” de tipos extremadamente bajos que pueden llevar a los particulares a creer que pueden asumir préstamos hipotecarios las cuotas de los cuales puede subir de forma importante cuando el Euríbor vuelva a situarse en valores superiores.

Muchos inversores, conscientes de lo expuesto con anterioridad, han preferido centrar sus esfuerzos en un segmento distinto al de la compra o alquiler de vivienda habitual. Estas alternativas han nacido a raíz de los cambios sociales que ha experimentado la propia sociedad en los últimos años:

Aumento de la esperanza de vida

Consecuencia de los avances en ámbitos como la sanidad, la educación o el cuidado a las personas mayores, la esperanza de vida ha subido en las últimas décadas. Ello ha llevado a la necesidad de unos servicios para conseguir que las personas mayores puedan ser atendidas y mantener una calidad de vida digna.

Así pues, hemos visto como se han incrementado el número de residencias para gente mayor o espacios de ocio reservados especialmente para ellos. Por lo tanto, invertir en ellos puede ser una buena alternativa. La tendencia es que el envejecimiento de la población se mantenga o aumente, de forma que es un sector en expansión. Además, no depende de los posibles vaivenes de distintos indicadores económicos respecto los cuales poco se puede influir.

Necesidad de mayor formación

Ante un mercado laboral cada vez más competitivo, se entiende que existe una necesidad de formación para poder tener presencia en él y optar a un buen puesto de trabajo. Además, las actuales pocas expectativas negativas de encontrar un puesto de acuerdo con lo que se espera, animar a las familias a invertir en educación.

Por lo tanto, espacios como residencias de estudiantes y similares están en alza y se seguirán demandando. Lo único que puede frenar este incremento son las variaciones en las tasas universitarias. A más altas, más complicado para las familias de poder realizar esta inversión.

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