Johan Cruyff, el arquitecto del ‘Dream Team’
Cruyff comenzó su aventura como técnico en el equipo en el que despuntó como jugador, el Ajax de Ámsterdam. Poco después de colgar las botas se incorporó a la dirección deportiva del club donde sentó las bases de un proyecto de futuro cuyos pilares debían ser un estilo de juego ofensivo y el apoyo a la cantera y la formación de jugadores de las categorías inferiores.
Fue en el año 1985 cuando se sentó por primera vez en el banquillo para ejemplificar todas esas ideas que había empezado impulsar en el club. Pese a no ganar la liga holandesa, el Ajax de Cruyff sorprendió a Europa con su fútbol y ganó dos Copas de los Países Bajos y una Recopa en las dos temporadas y media que estuvo en el cargo.
Su próximo destino sería el banquillo del Camp Nou. Sin título de entrenador llegó a un Barcelona en crisis y al que consiguió llevar a tocar la gloria. Lo importante para Cruyff, al igual que había hecho era en el Ajax, era la implantación de una filosofía que permitiese proyectar un futuro exitoso.
Pese a ganar la Recopa de Europa en su primera temporada, el arranque para Cruyff no fue nada sencillo. Los resultados no eran los esperados mientras el técnico seguía empeñado en la construcción de una plantilla que comprendiese el estilo que quería implantar.
La llegada al equipo de jugadores como Laudrup o Stoitchkov fueron claves para el éxito del holandés en el banquillo. Y en la temporada 90-91 consiguió alzarse con la liga y romper la hegemonía del Real Madrid y su Quinta del Buitre. En el año siguiente repitió el título liguero, pero si pasó a la historia del club fue por la conquista de la primera Copa de Europa del conjunto azulgrana.
Cruyff guió a su equipo a la final de Wembley para levantar la Orejona ante la Sampdoria. El gol de Koeman en la prórroga escribió en los registros del fútbol su gran obra en el fútbol como técnico: el Dream Team.
Antes de irse, aún ganaría dos Ligas más (consiguió cuatro de forma consecutiva) y ganaría al Real Madrid, en la temporada en la que llego Romario, por 5-0 en uno de los partidos más recordados por la afición azulgrana.
Su etapa estuvo marcada también por otra final de Copa Europa. Sin embargo, esta vez el Milan de Capello aplastó por 4-0 al Dream Team en Atenas. Ello llevó al técnico a iniciar una nueva renovación basado en jugadores de la cantera como De la Peña, Celades o los hermanos García. Pero los éxitos no fueron los mismos que los logrados por la generación de los Guardiola, Ferrer o Amor y el Real Madrid le devolvió el 5-0 de la temporada anterior.
El año 96 supuso el último de su aventura en el banquillo del Barcelona. Sin opciones de ganar ningún título y falta de dos jornadas su tensa relación con el presidente Núñez terminó por ser definitiva para el adiós de un técnico al que sustituyó su entonces ayudante Rexach. Cruyff nunca se fue del Barça, pues su filosofía de fútbol ofensivo y apoyado en los jugadores de la cantera sigue hoy vigente y ha llevado al club a los mejores años de su historia.