Refrescante limonada de acederas

Una refrescante limonada de acederas, o vinagrera, es interesante y saludable en estos tiempos bochornosos de verano, de temperaturas que pasan de los 40° C, donde hay que extremar los cuidados para no sufrir un golpe de calor o una deshidratación grave. El cambio climático existe, y estos veranos tan fuertes son una prueba de ello.

La acedera (Rumex acetosa) es nativa de Europa, donde se cultiva en diversas zonas por sus hojas comestibles cuando están jóvenes. Se cultiva desde hace siglos, y está presente en varios países europeos, en platos clásicos como la sopa de acederas. También se consumen sus hojas, igualmente frescas y jóvenes, en ensaladas. Precisamente en estas preparaciones, la acedera puede brillar con gran protagonismo por su sabor intenso, aromático y entre ácido y amargo. Se puede preparar, además de en sopas, en purés, rehogadas, guisadas, salteadas, y hasta rebozadas y fritas, como hacen en Afganistán. Quedan perfectas para aportar un toque ácido a las recetas.

En nuestro país no es tan usual como los del norte del continente o de la vecina Francia, pero sin duda se conoce y se emplea para preparar muchas cosas, como esta refrescante limonada de acederas, que, por supuesto, contribuye a paliar el calor de la temporada estival.

Ingredientes:

Cómo preparar una refrescante limonada de acederas:

1. Llenar una jarra con cubos de hielo hasta aproximadamente 2/3 de su capacidad.
2. En la licuadora, poner las hojas de acedera troceadas y 1 cucharada de azúcar.
3. Verter el agua, procesar sin agregar hielo, hasta obtener una mezcla lo más homogénea posible.
4. Verter la mezcla de acederas en la jarra con hielo con un colador, para que el resultado sea un líquido fino y liso.
5. Rellenar la jarra con la cerveza de jengibre y mezclar suavemente con un mezclador largo.
6. Pelar la raíz de jengibre y cortar en láminas finas.
7. Añadir el jengibre a la jarra y adornar con las frambuesas.

Esta refrescante limonada de acederas te sorprenderá por lo rica que queda. No tiene alcohol, pues la cerveza de jengibre, a pesar de su nombre, no se fermenta, por lo que los peques pueden beber de esta maravilla sin ningún problema. Recuerda hacer la limonada con hojas tiernas, pues de lo contrario estarán muy duras. Puedes hacer más cantidad simplemente doblando los ingredientes. Te garantizamos que encantará a todos y calmará un poco el agobiante calor.