Puigdemont exige también a Sánchez que reconozca a Cataluña como «nación» para apoyar su investidura
Junts asume que Sánchez no puede comprometerse aún a un referéndum y exige el reconocimiento de "nación" para Cataluña
El ex president catalán Carles Puigdemont ya ha trasladado a Pedro Sánchez su exigencia definitiva para dar luz verde al apoyo de Junts a la investidura del socialista: que se reconozca a Cataluña como «nación». Ésta es la condición definitiva que el dirigente fugado ha puesto sobre la mesa para certificar el apoyo de los siete escaños que Junts tiene en el Congreso y cuyo voto positivo necesita de forma obligatoria Pedro Sánchez, y que se une a la ya conocida de una ley de amnistía.
El reloj electoral no se detiene y ya queda poco más de un mes para agotar el plazo ante la investidura, que debe ser antes del 27 de noviembre para evitar una repetición electoral. Pero, tal y como contó OKDIARIO, el PSOE tiene aún más prisa y quiere tener cerrado su acuerdo con Junts antes del 4-N, con el objetivo de contar con al menos 20 días para «vender el relato», conocedores de que el camino para explicarle a la sociedad las cesiones al partido de Puigdemont no resultará sencillo en absoluto.
Estas cesiones pasan por la ley de amnistía y, como ha sabido ahora OKDIARIO, el reconocimiento de Cataluña como «nación». Esto significa que Puigdemont le ha pedido a Sánchez que vaya más allá de lo que marca la Constitución en su Artículo 2 del Título preliminar -que señala la «indisoluble unidad de la Nación española» y reconoce las «nacionalidades» que conforman España- como condición para brindar el necesario apoyo de Junts a su investidura. Las negociaciones entre ambos partidos, en cualquier caso, marchan por buen camino según relató este medio hace escasas fechas. Este martes, por otra parte, Sánchez cerró su acuerdo con Sumar, cuya líder, Yolanda Díaz, se reunió con el propio Puigdemont en persona el pasado mes de septiembre.
Referéndum pospuesto
Esta condición tiene, además, otra derivada. Junts ha renunciado a exigir a un eventual Gobierno de Sánchez que permita un referéndum de autodeterminación en Cataluña durante la próxima semana. Puigdemont asume que, en estos momentos, no es una posibilidad real que un Gobierno socialista, incluso si éste necesita ser sostenido por socios comunistas y separatistas de diverso pelaje, permita la celebración de ese referéndum, de modo que aceptan eliminar esta petición como condición sine qua non para brindar su apoyo a cambio de la exigencia de este novedoso reconocimiento de Cataluña como «nación».
Se da la circunstancia, además, de que otro partido cuyo apoyo necesita Sánchez para su investidura, el PNV (que ostenta cinco escaños) ha puesto sobre la mesa una propuesta similar en los últimos días. El presidente de los nacionalistas vascos, Andoni Ortuzar, insistió este pasado fin de semana en medios como La Razón o Radio Euskadi en que quiere «amarrar» el reconocimiento del País Vasco como «nación» antes de la investidura de Sánchez, que el mismo dirigente vasco vaticina que se producirá «sobre la bocina».