Marlaska sólo logra 8 voluntarios para reforzar la Guardia Civil ante la oleada de pateras en El Hierro

El Gobierno de Pedro Sánchez y el Ministerio del Interior llevan meses lidiando con una grave crisis de inmigración ilegal en Canarias, con récord absoluto de llegadas. Sin embargo, y pese a la falta alarmante de efectivos de la  Guardia Civil en puntos calientes como la isla de El Hierro, Interior ha dejado para septiembre la convocatoria «urgente» de agentes voluntarios para reforzar la isla. Las prisas del llamamiento y las escasas dietas han provocado que sólo 8 agentes se presenten voluntarios.

Según la comunicación enviada por el general jefe de la Zona de Canarias de la Guardia Civil, con «difusión urgente», la Isla del Hierro necesita agentes voluntarios de forma inmediata para hacer frente «a la llegada masiva de cayucos con inmigración ilegal». 

El llamamiento para cubrir esta comisión de servicio indemnizable, lanzado la pasada semana a todos los puestos de Guardia Civil en Canarias, requería de agentes y cabos primeros de las unidades de Seguridad Ciudadana o Fiscal y Fronteras para un periodo temporal de un mes, del 2 de septiembre al 3 de octubre. Como dietas se ofrecían 60 euros, una cantidad con la que los agentes deben cubrir su estancia y manutención. Insuficiente para las principales asociaciones de la Guardia Civil que han conocido esta solicitud.

La fecha tope para presentar candidaturas era el pasado 30 de agosto. Pero Interior no ha sido capaz de conseguir más que 8 agentes, tal y como ha sabido OKDIARIO de fuentes de la Guardia Civil. La mitad de ellos proceden de Unidades de Intervención de Seguridad Ciudadana (USECIC) de Tenerife.

La cifra del refuerzo es prácticamente testimonial, según señalan estas fuentes, a la vista de la carga de trabajo que tienen los aproximadamente 50 agentes que se hacen cargo actualmente de la seguridad de El Hierro. Con esa plantilla, que debe cubrir todas las necesidades de la isla -no solo en materia de inmigración-, la Guardia Civil asume que está «vendida» ante la oleada de pateras que se avecina para las próximas semanas y meses, coincidiendo con el buen tiempo en el mar.

«Se necesitaría al menos doblar la plantilla, de forma que se pueda cubrir la inmigración sin retraer la seguridad ciudadana. Cada patera que llega son horas y horas de trabajo, tanto logístico como de documentación, que obliga a dejar de lado todo lo demás», recuerdan estas fuentes de la Guardia Civil.

Lo que se avecina

La agencia de seguridad fronteriza de la Unión Europea, Frontex, no augura buenos tiempos para Canarias en lo que a inmigración ilegal se refiere. En un informe reciente del organismo se advierte de que las mafias que se dedican a este negocio del tráfico de personas están disminuyendo sus tarifas, cobrando precios mucho más bajos en comparación con otras rutas para dar el salto a Europa. Ya es la ruta más barata para entrar en la UE. Un efecto llamada que hace prever que la inmigración ilegal rumbo a Canarias va a aumentar considerablemente en los próximos meses, superando las cifras de récord de 2023.

Así lo advierte la agencia de seguridad de fronteras de la UE en su informe de Análisis de riesgos anual 2024-25. Los «crecientes movimientos» de inmigrantes africanos rumbo a Europa, «especialmente desde el Sahel, podrían aumentar aún más las cifras de la ruta del África Occidental», señala Frontex.

«Lo más probable es que esta ruta siga siendo una de las principales puertas de entrada a la Unión Europea», explica la agencia de seguridad fronteriza en su documento de análisis. Y entre las causas que llevan a ello, indican, están las bajas tarifas que aplican las cada vez más numerosas mafias de tráfico de personas en esa zona de la costa africana. Cada vez más grupos criminales se dedican a este tipo de tránsitos, más peligrosos que las travesías del Mediterráneo, pero con una logística mucho menor. El aumento de la oferta de traslados en cayuco ha provocado una caída de los precios de cada plaza, que ya puede encontrarse por apenas 1.000 euros.

«Las relativamente bajas tarifas cobradas por los traficantes de personas en esta ruta podría aumentar aún más el número (de pateras) en el África occidental», señala Frontex.