El Ejército asume los rastreos en todas las comunidades menos en Cataluña y País Vasco que los rechazan

El papel de los rastreadores se ha convertido en esencial para intentar frenar el aumento de casos de coronavirus en España. Unos 2.000 militares están participando en esta tarea en todas las comunidades autónomas de España con excepción del País Vasco y Cataluña que se han negado a aceptar la ayuda del Ejército. También Extremadura se ha negado, pero por motivos muy distintos.

Las Fuerzas Armadas están a disposición de los territorios españoles desde el pasado mes de agosto. Sus actividades suponen un gran apoyo en los rastreos de aquellos que pueden estar contagiados con coronavirus a pesar de no tener conocimiento de ello.

Sin embargo, Cataluña y País Vasco han decido declinar la oferta y no incluir militares entre sus rastreadores a pesar de que éstos cuentan con una formación psicológica, sanitaria y en comunicación especial para ello.

El Gobierno vasco, presidido por Iñigo Urkullu, considera que su sistema de rastreos del coronavirus es suficiente para poder frenar la segunda ola de la pandemia, aunque las cifras de contagios continúan subiendo a diario. El Gobierno de Iñigo Urkullu ya ha anunciado que, bajo ningún concepto, accederá al ofrecimiento del Ministerio de Defensa para desplegar militares especializados en tareas de rastreo.

Según defiende el Gobierno regional de Urkulu, ya cuenta con suficientes medios humanos para realizar estas tareas. «La capacidad propia es adecuada», advierten desde la Consejería de Sanidad vasca. Y ha anunciado que, en caso de que sea necesario un refuerzo, se procederá a contratar a más personal civil.

Por su parte, la portavoz del Govern catalán, Meritxell Budó, descartó la solicitud de ayuda de rastreadores militares en Cataluña y diseñó una estrategia propia.

La última comunidad en pedir ayuda al Ejército ha sido La Rioja que comunicó este sábado al Ministerio de Defensa que necesitaba 30 rastreadores para luchar contra el coronavirus.

Un mes después de que el Gobierno pusiese a disposición de las comunidades al Ejército es el de Tierra el que ha asumido el liderazgo de los rastreos con 1.100 efectivos.

Inicialmente fueron 13 autonomías y las dos ciudades autónomas de Ceuta y Melilla las que dieron el paso de pedir rastreadores militares para completar sus equipos y ahora sólo País Vasco y Cataluña trabajan sin su ayuda.

En cada autonomía se ha formado una Unidad de Vigilancia Epidemiológica (UVe) de diferente tamaño según las necesidades. Estas unidades se dividen a su vez en secciones formadas generalmente por 32 militares, que son las que hacen turnos para el rastreo de pacientes.

Formación exprés

Según explican, en algunos puntos de España se está recurriendo a realizar peticiones de voluntarios entre la tropa y marinería -las escalas más bajas de la jerarquía militar- bajo la ‘amenaza’ de que, de no cubrirse las plazas, se asignarán de forma ‘forzosa’. Es decir, será el mando de la base o cuartel donde se necesitan más efectivos el que decida quiénes deben entrar a la fase de formación para hacerse rastreador, tarea que no va acompañada de ningún tipo de incentivo económico extra.

Por otra parte, explican estas fuentes militares, la formación que están recibiendo consiste en «nociones muy básicas» sobre la enfermedad y el proceso de rastreo, una tarea cuya efectividad depende directamente de las capacidades del entrevistador (el rastreador) para determinar qué contactos de la persona sospechosa podrían haberse contagiado del virus. «Una persona que muestra síntomas ha estado en contacto con docenas de personas en las últimas 48-72 horas, y es fundamental disponer de alguien con formación sanitaria que pueda discernir cuáles de ellos son contactos estrechos y cuáles no».

Desprecio de Iglesias

Pablo Iglesias, vicepresidente segundo del Gobierno y líder de Podemos, ha provocado un profundo malestar en la Policía Nacional y el Ejército al despreciarles asegurando que no son «fundamentales» para combatir la pandemia del coronavirus que hasta el momento ha dejado más de 45.000 muertos en España.

«Los trabajadores públicos van a ser fundamentales para seguir combatiendo una pandemia que nos está poniendo en una situación de riesgo no son policías ni militares, son médicas, enfermeros, profesores y trabajadores de los servicios públicos», declaró Iglesias el pasado martes en una entrevista concedida a La hora de La 1.

El mismo líder de Podemos colgó este fragmento de la entrevista a través de un mensaje colgado en su perfil de Twitter. «La cooperación institucional es un deber del Gobierno, pero no podemos compartir las medidas de Ayuso y Aguado. Para frenar la pandemia en Madrid faltan más médicos, más rastreadores, más docentes y más transporte público; no policías, militares y medidas que segregan por clases», señaló haciendo hincapié en sus declaraciones en la entrevista.

La cooperación institucional es un deber del Gobierno, pero no podemos compartir las medidas de Ayuso y Aguado. Para frenar la pandemia en Madrid faltan más médicos, más rastreadores, más docentes y más transporte público; no policías, militares y medidas que segregan por clases. pic.twitter.com/cHOsKlvNVW

— Pablo Iglesias 🔻 (@PabloIglesias) September 22, 2020