El aviso de la OMS sobre los ancianos que Illa ignoró: «Es recomendable que sean tratados en hospitales»

Sanidad ignoró el protocolo de la Organización Mundial de la Salud (OMS) que deja clara su preferencia de que los pacientes de residencias fuesen tratados en un centro hospitalario «especialmente aquellos con factores de riesgo» que pudieran agravar la enfermedad, lo que incluía según el organismo a «mayores de 60 años y con co-morbilidades». Los documentos del Ministerio de Sanidad insisten en las medidas de aislamiento de los pacientes contagiados por coronavirus, dentro de la propia residencia, y apenas se hace referencia al traslado hospitalario.

Las guías del Ministerio para las residencias – en versión de 5 y 24 de marzo- establecen «como norma general» que «los residentes que presenten sintomatología respiratoria aguda deberán restringir sus movimientos lo máximo posible y quedarse en una habitación con buena ventilación -preferentemente al exterior- e idealmente con un baño propio».

Sanidad apenas menciona el traslado a un centro hospitalario, pese a la especial situación de vulnerabilidad de estos pacientes, los más críticos en la pandemia. Incluso se puede leer, en el caso de aquellos residentes que pudieran haber sido contacto de un caso confirmado, que deberían «restringir sus movimientos lo máximo posible y quedarse en una habitación con buena ventilación» destacando que «no es necesario su traslado al centro sanitario si su estado general es bueno».

La OMS consideraba la especial vulnerabilidad de estos pacientes y por ello, se decantaba por su traslado para el tratamiento en un centro sanitario, especialmente aquellos «con factores de riesgo». Factores que podrían desencadenar en un resultado fatal, dada la rápida evolución de la enfermedad, como luego se demostró. El organismo pedía considerar el asesoramiento de un profesional médico para valorar las posibles complicaciones antes de optar por el aislamiento.

Mortalidad

En el dossier de Sanidad sobre residencias se demuestra que el Ministerio de Salvador Illa era plenamente consciente de la gravedad de la enfermedad en el colectivo.

«Los datos y los estudios realizados hasta la fecha muestran que el Covid-10 afecta de forma más grave a mayores de 65 años con patología cardiovascular previa (sobre todo hipertensión e insuficiencia cardíaca) y en menor medida a aquellos con patología respiratoria crónica y diabetes. La mortalidad aumenta con la edad», refería el departamento.

Se cita, además, un estudio realizado en China, que revela que la mortalidad en esa franja de edad aumenta considerablemente, siendo del 3,6% entre 60-69 años; del 8% entre 70-79 años y del 14,8% en los mayores de 80 años.

Meses sin protocolo

«Los residentes y usuarios de los centros sociosanitarios se encuentran en una situación de vulnerabilidad ante la infección por Covid-19 por varios motivos: habitualmente presentan patología de base o comorbilidades; suelen presentar edad avanzada; tienen contacto estrecho con otras personas (sus cuidadores) y otros convivientes, y suelen pasar mucho tiempo en entornos cerrados y con población igualmente vulnerable», destacaba el Ministerio. Pese a ello, se optó por las indicaciones sobre el aislamiento sin dar urgencia al traslado hospitalario.

El Gobierno era consciente de la gravedad de la enfermedad, al menos, desde el 10 de febrero, según demuestran sus propios informes. En esa fecha, conocía ya que un tercio de los primeros 99 pacientes ingresados en la ciudad china de Wuhan habían precisado de cuidados intensivos. También avisaba que la mortalidad podía ser superior a la notificada. Y también sabía que la enfermedad impactaba más en personas con enfermedades de base. En dicho dossier se destaca, también en referencia a otro estudio chino, que casi la mitad de los hospitalizados tenían enfermedades crónicas de base en distintos órganos y sistemas. Aún así, el Ministerio no dictó un protocolo para las residencias hasta el 5 de marzo. El 31 de enero la OMS había declarado la epidemia una Emergencia de Salud Pública de Importancia Internacional.

Otras recomendaciones

La guía de la OMS recogía otras recomendaciones, no incluidas en los protocolos de Sanidad para las residencias, como «asegurar el distanciamiento físico de los residentes» mediante la cancelación de actividades grupales, escalonando las comidas o directamente evitando el servicio ode comedores o «hacer cumplir una distancia mínima de 1 metro entre residentes».

La OMS también pedía que se notificarsen tanto los casos confirmados como los sospechosos. Como informó OKDIARIO, el Gobierno no ha facilitado aún las muertes ocurridas en las residencias, pese a que hace dos meses requirió el dato a las comunidades autónomas. Fuentes del departamento sostienen que las cifras se están analizando.