MOVILIZACIÓN

Los agricultores piden a los ciudadanos hacer acopio de alimentos y combustible: «El 6-F se corta España»

"El sector agrario ha despertado", avisan los convocantes independientes de la tractorada nacional

"No es sólo un problema español, es un problema de toda la UE", subrayan tras las protestas en Francia

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Segundo Sanz

Agricultores independientes a lo largo y ancho de España se están movilizando en redes sociales para protestar el próximo 6 de febrero en una tractorada contra las «leyes y reformas que están hundiendo al sector primario y despoblando nuestro mundo rural». Con la pretensión de «paralizar» el país a fin de ser escuchados en sus demandas, estos agricultores y ganadores que no se identifican con ningún sindicato ni partido político están pidiendo también colaboración ciudadana, instando a los españoles a hacer acopio de alimentos y combustible por los efectos que puedan tener las protestas en la cadena de suministro.

«El 6 de febrero se corta España», aseguran en redes sociales miembros de la autodenominada Agrupación Nacional de Agricultores y Ganaderos del Sector Primario. «Id haciendo acopio de alimentos y combustible; ya nos hemos hartado», avisan a los ciudadanos, mientras subrayan que están recibiendo adhesiones de otros «muchos» sectores, incluidos camioneros y taxistas. «Esto ya no es sólo un problema español, es un problema de toda la Unión Europea», subrayan.

Precisamente, este jueves las protestas de agricultores, también españoles, llegaron hasta las mismas puertas del Parlamento Europeo, donde se encontraban reunidos los líderes de los países miembros. Además, desde el pasado lunes, los camioneros de Francia mantienen cortados cientos de kilómetros de carreteras para denunciar «competencia desleal» por parte de otros países.

En España, una de las organizadoras de la movilización ciudadana, Lola Guzmán Sáez, ha compartido en redes un vídeo en el que explica que dicha agrupación nacional del sector primario cuenta ya con enlaces en «todas las capitales de España» para organizar la protesta del próximo 6 de febrero.

«Quiero informar a toda España de que el sector agrario español ha despertado», ha enfatizado Sáez, incidiendo en que si éste «no ha salido antes a manifestarse», como ha ocurrido en otros países de la Unión Europea (UE), ha sido por el «yugo» de los sindicatos y del Gobierno.

Precisamente, la plataforma de Sáez ha difundido un manifiesto donde incluye esta cuestión entre las razones que explican su paso adelante. «Debido a la pasividad de los sindicatos agrarios al trasladar nuestros problemas a los Ministerios pertinentes y a la Comisión Europea, nos vemos obligados a agruparnos todos los agricultores y ganaderos españoles independientemente de cualquier organización, sindicato o partido político, para pelear y ser escuchados ante la nueva PAC y las leyes aprobadas para el cumplimiento de la Agenda 2030», dice el comunicado.

Unas leyes, prosigue la denuncia, «que nos están asfixiando, que nos resultan imposibles de llevar a cabo con nuestros medios» y que suponen además una «enorme carga burocrática». De esta manera, estos agricultores independientes anuncian una cadena de protestas que comenzarán el día 6 de febrero de 2024 y se prolongarán «hasta que nos escuche el Ministerio de Agricultura, que es el que nos representa, y traslade nuestro malestar a la Comisión Europea y Ministerios pertinentes».

Derogar la Agenda 2030

Entre sus demandas se encuentra, por ejemplo, «rebajar las exigencias de la nueva PAC agroambiental impuesta, que nos reduce drásticamente las producciones y en algunos casos imposibles de llevar a cabo». También piden la derogación de la Agenda 2030, de la ley de bienestar animal y de todas aquellas leyes ambientales y protección de especies que «atentan contra la agricultura, ganadería y zonas rurales».

Asimismo, estos agricultores reclaman a las autoridades no sólo el compromiso de «no reducir la rebaja de impuestos sobre el gasóleo agrícola», sino también la «implementación de alguna mejora, por los altos precios que tenemos».

Otras medidas que exigen son la «imposición de aranceles a la entrada de productos extracomunitarios», así como la «exigencia de cumplimiento de control fitosanitario de la normativa europea para todos los productos que entran de países extracomunitarios». En este contexto, también reivindican una mayor «claridad» en el etiquetado en referencia a los países de procedencia de los productos, y en lo relativo al «precio en origen y final».

Además, en un momento marcado por la sequía, abogan por una política de gestión del agua «consecuente con las necesidades de cada territorio» e instan a actuar contra las «prácticas de Geoingeniería Climática, que tanto perjudica al sector», remarcan.

Entretanto, si bien el jefe del Gobierno, Pedro Sánchez, rompió este jueves en Bruselas su silencio y condenó los ataques a transportistas y productores españoles en suelo galo, el titular de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, agendó para este viernes una reunión en el Ministerio con las organizaciones agrarias mayoritarias ASAJA, COAG y UPA ante el horizonte de una oleada de protestas del campo español. De hecho, otras plataformas de agricultores también han avanzado protestas en España para los próximos 13 y 21 de febrero.

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