El PSOE llama a cargos y militantes para que acudan el domingo a Ferraz «pase lo que pase»

El clima de depresión en el PSOE, pese a los ánimos que intentan insuflar Pedro Sánchez y José Félix Tezanos, se hace visible con la desmovilización de cuadros y bases en esta campaña electoral. Todo, aunque fuentes del partido destacan «un ligero ascenso» en los sondeos, pero, sin embargo, muy lejos de la remontada que vende a diario el presidente. Ante esta situación y la dificultad para llenar algunos actos, Ferraz está llamando a varios cargos del partido y afiliados para que acudan el domingo a la sede federal «pase lo que pase», para «apoyar» a Sánchez.

A diferencia de lo que ocurrió en las elecciones del pasado 28 de mayo, que iniciaron la debacle socialista en nuestro país, Pedro Sánchez sí estará en Ferraz este domingo por la noche, sea cual sea el resultado. La decisión, explican en el entorno del presidente, «está tomada». «Va a dar la cara», relatan fuentes consultadas por este periódico, después de que en los últimos comicios y en los del 4M en Madrid se recluyera entre las cuatro paredes del Palacio de La Moncloa.

Teniendo en cuenta la presencia «sí o sí» del candidato en la sede, y que en consecuencia saldrá en uno u otro momento de la noche para dirigirse a los afiliados y a los españoles, la dirección federal quiere evitar una imagen de arrasamiento. De Sánchez hablando para nadie. De soledad. Más que nada por qué él tiene intención de seguir liderando el partido. Y la noche electoral, con el PP y Vox, probablemente celebrando la suma de la derecha, será «importante anímicamente».

La idea que manejan en su equipo es que Sánchez llegue al cuartel general de los socialistas pasadas las siete de la tarde, una hora antes del cierre de los colegios electorales. Se desplazará directamente desde su residencia oficial, dónde pasará gran parte del domingo junto a su familia tras ir a votar a primera hora, y entrará en coche por el garaje. Por ello, únicamente se dejará ver una vez conocido el resultado electoral, sin someterse al escrutinio de la prensa. Durante la contabilización de los votos electorales, estará en su despacho de la planta cuarta, junto a su equipo de colaboradores más cercano.

Aunque en el PSOE apelan a la épica de la remontada, pocos prevén que Sánchez pueda revertir unos sondeos que dan como claro ganador a Alberto Núñez Feijóo y vaticinan una suma de la derecha. Impidiendo así un nuevo Gobierno progresista. Por lo que «el funeral» será «mayúsculo», según indican las fuentes anteriormente citadas. Más que nada por la «gestión de las expectativas» que el propio candidato se ha encargado de transmitir para subir los ánimos. «Él está convencido de que va a ganar», aseguran.