Las grandes gestoras pierden el miedo a invertir en compañías sin tener en cuenta la sostenibilidad
El mercado coloca a la inversión en base a factores ambientales, sociales y de gobierno corporativo (ESG por sus siglas en inglés) como la piedra angular que está cambiando para siempre la forma de invertir. Las grandes gestoras mundiales lanzan sin parar nuevos fondos de inversión en base a criterios ESG. En cambio, BlackRock, el mayor inversor del mundo con 8,5 billones de dólares, ha echado el freno, llama a la reflexión y cambia su estrategia.
El apoyo de la gestora a las propuestas de los accionistas de compañías de Wall Street sobre cuestiones sociales y ambientales cayeron en picado en las juntas de accionistas de este año. El grupo votó a favor del 24%, desde el 43% del año pasado, según los datos facilitados por la propia BlackRock. «Muchas propuestas de accionistas buscaban dictar el ritmo de los planes de las empresas sin tener en cuenta el estado financiero y los progresos ya realizados», señalaron desde la gestora estadounidense.
State Street, otro referente de la inversión, descendió su apoyo a algo menos del 20%, desde el 25% del año pasado: «Las propuestas sociales y ambientales de los accionistas son un vía importante, pero creemos que votar sobre la elección del consejo de administración es una forma mucho más poderosa de responsabilizar a las empresas», comentaron desde la firma de Boston. Ahora, los inversores esperan a los datos de Vanguard, la tercera entidad de inversión de mayor relevancia.
El cambio se extiende más allá de Wall Street y llega a España. «Todas las cotizadas, independientemente de su tipo de negocio, se acogen a los criterios ESG que más les convienen y sólo con eso ya están presentes en los fondos de inversión. Al final, te miras los fondos ESG y están las mismas empresas de siempre», señalan fuentes financieras.
Las últimas actualizaciones de las carteras de dos de las gestoras más representativas y con más relevancia del mercado español, Cobas AM y Bestinver, muestran que lo importante es conseguir rentabilidad para los partícipes y toca invertir en compañías donde se cree que se van a lograr los mayores rendimientos, y más en un año tan complejo para los mercados como este. Por ejemplo, Cobas AM, la gestora de Francisco García Paramés, el Warren Buffett español, se colocó como la segunda gestora más rentable del semestre en España, mientras que todas las grandes cerraron los seis primeros meses del año en negativo, según los datos de la consultora VDOS.
La energía tiene el mayor peso dentro de la cartera internacional, un 46%. Se desgrana en un 11% para las inversiones en infraestructuras de Gas Natural Licuado, un 11% para los servicios de petróleo, un 11% para las infraestructuras de transporte de petróleo y gas y otro 11% para los productores de petróleo y gas. Respecto a la cartera ibérica, la energía es la tercera mayor apuesta, el 16%. Un 14% es para los servicios de petróleo y un 4% para los servicios de petróleo y gas, aunque se salieron de la tabacalera British American Tobacco.
Bestinver también apuesta por el petróleo para solventar las pérdidas a doble dígito que registraron sus fondos más representativos en los seis primeros meses del año. Bestinfond, su fondo más emblemático, perdió un 20% hasta junio. Para recuperarse, la gestora ha incrementado posiciones en BP y Shell, que se colocan entre las compañías con más peso del fondo, y han entrado en Galp. En Bestinver Internacional el mayor peso en la cartera es el de BP y han comprado más acciones, además de subir la apuesta por Shell. Misma tónica de representación y aumentos de ambas empresas en el fondo Bestvalue, más la entrada de Galp. Esta petrolera portuguesa se ha colocado como la tercera mayor apuesta de Bestinver Bolsa. Se trata de un fondo que apuesta por compañías ibéricas donde reinan los bancos españoles, pero aparece Repsol como la quinta mayor posición.