Los agricultores exigen a Sánchez participar en las inspecciones de alimentos de Marruecos y Argelia
Los agricultores defienden que los consumidores también deberían de estar presentes en los análisis de productos importados
Los agricultores no se fían del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y consideran que tanto ellos como los consumidores deberían estar presentes en las inspecciones de los alimentos importados del extranjero, especialmente los que provienen «del norte de África» (Marruecos, Argelia y Túnez). Para el sector agrario, los controles fronterizos deberían contar «con una corresponsabilidad para tranquilizar tanto a consumidores como a los productores».
Así lo afirma Luis Cortés, coordinador estatal de Unión de Uniones, la segunda asociación agrícola con mayor representatividad en España. El representante defiende que los productores y los usuarios deberían tener un papel activo en las inspecciones que tratan de evitar la entrada de productos que incumplen las normas sanitarias europeas.
«Se debería permitir la presencia de representantes de agricultores en la toma de muestras y en los resultados de los análisis de los productos», defiende el delegado agrario. Con ello, «estaríamos todos mucho más tranquilos», asegura. Es decir, los trabajadores agrícolas no confían en los procedimientos que lleva a cabo el Ejecutivo y piden poder revisarlos.
Además, Cortés considera que «los consumidores también deben estar presentes cuando se analicen las muestras de productos que claramente están intoxicando a la población». Esa presencia se haría efectiva a través de asociaciones como la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU).
El líder agrario pide al Gobierno de Sánchez que «sea responsable» y que los productos que llegan a los puertos «se analicen exactamente igual que los que producen los agricultores de la Unión Europea». «Nos analizan de manera periódica», explica.
Por ello, el representante exige que «se tomen muestras de todos los productos que entran de países terceros y se hagan las pruebas de los análisis de residuos tóxicos». Cortés asegura que, si esto se hiciera, «muchísimas de las partidas de productos que están entrando en España serían devueltas a su país de origen porque no cumplen los requisitos impuestos de la Unión Europea».
Aumentar el control fronterizo de Marruecos es una de las reivindicaciones que los agricultores están defendiendo en las protestas. El sector reclama que los productos importados tengan los mismos requisitos que los comunitarios, pero también avisa de que la falta de inspecciones causa que entren alimentos con niveles de pesticidas que superan los límites establecidos por la normativa europea.
Alimentos de Marruecos
De hecho, un análisis solicitado por los agricultores y revelado por OKDIARIO muestra que las judías provenientes de Marruecos poseen 0,029 mg/kg (miligramos por cada kilogramo) de benzoato de emamectina B1 a, uno de los pesticidas que se utilizan para el tratamiento de las hortalizas con el fin de reducir la presencia de insectos en las plantaciones.
Estos niveles triplican los topes que establece el Reglamento de los límites máximos de residuos de diferentes insecticidas (benzoato de emamectina, espinosad, espirotetramato, etofenprox, etoxazol, flutriafol, fosmet, glifosato y piraclostrobina) de la Comisión Europea.
El análisis de las judías se realizó el pasado 14 de febrero gracias a un prestigioso laboratorio privado al que recurrieron los agricultores. El Gobierno no detectó esta irregularidad. Es más, Sánchez no informa sobre el incumplimiento de ningún alimento importado de Marruecos que pudiera exceder los límites de pesticidas exigidos por la normativa europea desde septiembre de 2023.
En concreto, la última notificación española se dio cuando las autoridades detectaron el exceso de un pesticida en las aceitunas marroquíes. En concreto, unos análisis hicieron saltar las alarmas al revelar que las aceitunas y el arroz de Marruecos contenían el pesticida clorpirifos en una cantidad de 0,067 mg/gk-ppm. El Límite Máximo de Residuos (LMR) que fija la Unión Europea es de 0,01 mg/kg, por lo que los productos contendrían hasta casi 7 veces más de la sustancia de lo que permiten las autoridades europeas.
Por tanto, los agricultores consideran que el Gobierno debe aumentar los controles fronterizos y las inspecciones sobre los alimentos importados, algo que el ministro de Agricultura y Pesca, Luis Planas, se ha comprometido a llevar a cabo. Sin embargo, la afirmación del dirigente ha sido interpretada por el sector como una forma de reconocer que, hasta ahora, están entrando numerosos productos irregulares.
«El ministro dice ahora que va a aumentar las inspecciones en fronteras y puertos para que no entren productos con tratamientos ilegales porque no se está haciendo», declara Unión de Uniones. Es decir, para los agricultores, «el ministro reconoce (con sus declaraciones) que hay flexibilidad en las importaciones de los puertos españoles y se están introduciendo unos productos con fitosanitarios prohibidos en la Unión Europea». «Vergüenza le tenía que dar», lamentan.