Las nueve veces que Messi ha regateado la expulsión con el Barça

Las actuaciones de Leo Messi en el regreso de la Liga después del parón por el coronavirus han hecho más ruido por la polémica que por las innatas cualidades del ’10’ azulgrana. En medio de la búsqueda del gol 700 en su carrera deportiva, Messi se ha escapado de la expulsión en los dos últimos partidos del Barcelona, en los que no encontró el gol pero sí pudo ver el camino de los vestuarios por sendas acciones de las que salió impune, una constante a lo largo de su carrera deportiva.

El pisotón de Messi a Yeray, en una acción en la que el central llega antes a una disputa y el argentino lo hace tarde, y clavándole los tacos a su rival, levantó ampollas en el Athletic Club, debido a la peligrosidad de la entrada de Leo. El argentino no vio ni siquiera la tarjeta amarilla por parte de Gil Manzano, quien posiblemente no vio el momento del pisotón, pero sí pudo haber sido avisado por el VAR, que desestimó influir en una jugada que al comienzo de la Liga se catalogó como expulsión clara.

Sin embargo, para muchos esa acción no debió haberse producido, porque Messi debía estar cumpliendo sanción por una agresión, en el encuentro ante el Sevilla, a Diego Carlos. El ’10’ le propinó un golpe en el cuello al central brasileño después de un lance entre ambos, del que de nuevo salió de rositas y sin recibir ni siquiera una advertencia del árbitro, que sí castigó con amarilla a otros miembros de la tangana formada.

Messi ha sido expulsado en dos ocasiones a lo largo de su carrera deportiva, pero ninguna de ellas ha llegado con la camiseta del Barcelona. El atacante vio la roja con Argentina contra Hungría, en un amistoso en 2005, y frente a Chile en la Copa América 2019, pero con la camiseta azulgrana ha gozado de una bula que le sigue acompañando pasados los años.

Si repasamos las acciones susceptibles de expulsión para Messi con el Barcelona, veremos que no son pocas y que en todas y cada una de ellas, se marchó de la acción sin el castigo mayor.

Escupe a Duda

En 2008, La Rosaleda presenció la que posiblemente la imagen más antideportiva de Messi sobre un terreno de juego. En mitad de una discusión con Duda, el argentino le lanzó un escupitajo aprovechando la mirada hacia otro lado del árbitro, que no vio la acción ni fue avisado por sus asistentes de un lance que podría haber supuesto una sanción ejemplar para el futbolista argentino. El comité de competición no entró a castigar a Leo.

Pelotazo a la grada del Bernabéu

El famoso rally de Clásicos de 2011 entre Real Madrid y Barcelona, con la polémica servida entre Mourinho y Guardiola, dejó una acción susceptible de expulsión para Messi que, sin embargo, quedó en nada para los árbitros, pero aún recuerda el madridismo. Un cambio de juego de Dani Alves se marchó largo para el control de Messi, quien llegó justo a tocar la pelota sobre la línea de banda y en lugar de controlarla o dejarla salir, decidió propinar un pelotazo imperdonable a la afición del Real Madrid, que pronto se lanzó a reprocharle, junto con los jugadores, una acción sin sanción por parte del colegiado.

Expulsión perdonada en el rally de Clásicos

Meses después, también en el Bernabéu, Messi no destacó por lo antideportivo pero sí pudo ser expulsado después de ver la primera cartulina amarilla por protestar, y zancadillear minutos después a Xabi Alonso para cortar una jugada del Real Madrid. Fernández Borbalán pasó de la jugada, señalando una simple falta y no amonestando al ’10’, algo que habría significado su marcha del partido antes del descanso.

Lanzamiento de bota y agresión en el Gamper

En 2016, en un encuentro ante el Sevilla, Messi cargaba de nuevo con una amarilla por protestar, aunque en esta ocasión pudo llevarse el doble castigo, y es que, sin importarle la cartulina de acababa de ver, lanzó su bota en señal de discrepancia con el árbitro, Jaime Latre, que no vio motivos para mostrar una roja que a vista de los acontecimientos era clara. Unos meses antes, aunque en un amistoso, Leo también había centrado la polémica al agarrar del cuello al futbolista de la Roma, Mapou Yanga-Mbiwa, tras una discusión en el Trofeo Joan Gamper. La nula tensión competitiva evitó entonces su expulsión.

Expulsión perdonada en Anoeta

2017 también contó con una potencial expulsión de Messi, muy alterado en el encuentro ante la Real Sociedad. González González le castigó con amarilla por demorar el saque de una falta y minutos después, el ’10’ hizo lo mismo con un lanzamiento de Illarramendi, interrumpiendo su saque al ponerse delante. Eso, sin embargo, no fue suficiente para que el colegiado le sacara la segunda amarilla.

Agresión a Fabinho antes de la remontada del Liverpool

Antes de los dos recientes episodios polémicos de Messi, el último que se recuerda es el que vivió en la recordada eliminatoria de Champions con el Liverpool. En el encuentro de ida, Leo agredió sin balón a Fabinho en una jugada de ataque del propio Barcelona, pero no tuvo consecuencias disciplinarias a pesar de lo claro de la acción. El Barça acabó despidiéndose de la Champions de forma cruel días después, en un partido que pudo no haber contado con Messi.