Messi y Suárez destrozan al Sevilla en ocho minutos (3-0)
El Barcelona reventó al Sevilla en apenas ocho minutos. Los culés pasaron por encima de los andaluces en una primera parte brillante donde las individualidades de Messi y Luis Suárez decantaron el choque ante un rival que dista mucho de su mejor momento de forma. El equipo de Sampaoli debe empezar a mirar por el retrovisor tras haberse desinflado en el mes de marzo.
Luis Enrique se esperaba un Sevilla como el de la primera vuelta y se encontró con el molde. El conjunto de Sampaoli compareció como un sparring esperando el indulto de un boxeador mucho mejor. Arrinconados en las cuerdas, sin apenas tocar un balón en los primeros 10 minutos, los visitantes se salvaron del primer directo de Messi.
El argentino puso en la cruceta un disparo desde la frontal en el minuto tres. Las posesiones del Barça eran eternas y comprimían a los andaluces en apenas 25 metros en su propio campo. No hay que restar mérito a unos culés que presionaron altísimo ante la imprecisión sevillista.
Sin embargo, la suerte pudo cambiar el sino del encuentro. En un fallo en cadena de la defensa culé, Nzonzi se plantó sólo contra Ter Stegen y el francés lanzó al muñeco. Esa ocasión hizo que el Sevilla se creciese por momentos. Vitolo, de cabeza, desperdició otra ocasión.
Con los de Sampaoli viniéndose arriba, el Barça supo dejar que su rival desprotegiese su defensa y los machacó al contragolpe. Un robo de Messi en la medular permitió una brutal arrancada del argentino hasta el área. Centró buscando a Luis Suárez con Mercado anticipándose en un despeje poco afortunado que permitiría al uruguayo mostrar un tremendo arsenal de recursos definiendo de chilena.
La inocencia del Sevilla da un doblete a Messi
Al Sevilla no le quedó más remedio que ir a buscar la portería de Ter Stegen, pero el equipo de Sampaoli acudió al envite sin fe y volviendo a cometer los mismos errores que desembocaron en el primer tanto. Una pérdida de Nasri –lamentable su actitud en algunos lances– montó una nueva contra vertiginosa de los azulgrana. Neymar se pegó la carrera, Suárez amagó con el remate y asistió a un Messi que, a placer, la empujaba.
Los hispalenses culminaron su claudicación encajando el tercer gol en apenas ocho minutos. En esta ocasión, los visitantes fueron muy inocentes para despejar un córner y allí estaba Messi para empalar de volea la sentencia al cuarto de la Liga –ahora mismo su nivel sería de permanencia– en el minuto 33 de partido.
El Sevilla, tras tanto golpe seguido, no reaccionó hasta la segunda mitad. Sampaoli planteó un partido de correcalles y alguna ocasión cayó del lado hispalense. Ter Stegen, sin embargo, demostró que a día de hoy disfruta de un magnífico momento de forma y desbarató cualquier intentona del gol del honor.
Luis Enrique pudo regular el esfuerzo y dio descanso a Suárez, Piqué –que además forzó la quinta amarilla– e hizo debutar al canterano Carles Aleña. El Barcelona se echó la siesta ante un rival que se le ve desfondado y carente de moral tras el golpe de la Champions con el Leicester. Los culés se mantienen fuertes en la lucha por la Liga gracias a la infalible MSN.