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Hay pocos alimentos más clásicos en Navidad que las uvas, sobe todo cuando llega la Nochevieja. Sin embargo, pelarlas puede ser algo pesado por lo que muchos prefieren comprarlas ya preparadas. Pese a ello, hay un truco muy básico para hacerlo en segundos.
Si sigues este método para pelar uvas las tendrás preparadas en muy pocos segundos. Además, no vas a necesitar ningún ingrediente extra ni nada que cambie su sabor.
Con este truco vas a conseguir tener tus uvas preparadas en muy poco tiempo y disfrutar de ellas cuando quieras. Recuerda que es uno de los alimentos más nutritivos que puedes encontrar. Además, podrás ahorrar dinero.
El truco para pelar las uvas en cuatro sencillos pasos
Las navidades son unas fechas perfectas para reunirse con la familia, pero también es una época de estrés y gasto. Por ello, cualquier truco destinado a ahorrarnos tiempo o dinero es bienvenido.
Lo único que debes hacer para pelar las uvas es seguir estos cuatro pasos:
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- Prepara un recipiente con agua hirviendo: llena un cazo con agua y caliéntala. No hace falta que sea una gran cantidad, ya que sólo necesitas que las uvas queden completamente sumergidas durante el proceso.
- Escalda las uvas: introduce las uvas en el agua hirviendo durante unos 30 a 45 segundos. Este paso es crucial para que el calor afloje la piel, facilitando su retirada posterior. Ten cuidado de no sobrepasar este tiempo, ya que corres el riesgo de cocerlas.
- Enfría las uvas: con ayuda de una espumadera, retira las uvas del agua caliente y sumérgelas inmediatamente en un bol con agua helada o hielo. Este choque térmico no sólo detiene el proceso de cocción, sino que también ayuda a que la piel se desprenda con más facilidad.
- Retira la piel: una vez que las uvas estén frías, coge cada una entre tus dedos y presiónalas ligeramente. Verás cómo la piel se desliza con facilidad, dejando la pulpa lista para comer. Este método funciona especialmente bien con uvas de piel fina, como la variedad moscatel.
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¿Por qué el truco para pelar uvas es tan bueno?
El truco para pelar uvas es muy efectivo gracias al contraste entre calor y frío. Con el primer paso la piel se expande y se separa ligeramente del interior. Con el segundo paso la contrae y hace que sea muy sencillo retirarla.
Obviamente la comodidad es un factor importantísimo para que este tipo de remedios caseros hayan ganado fama. Sin embargo, hay otra circunstancia todavía más relevante en Navidad.
Las uvas peladas suelen ser más caras en los supermercados. Lo mejor para ahorrar dinero es que compres un buen racimo de uvas y las prepares tú mismo. Como ves, sólo va a costarte unos segundos y conseguirás mejores precios y un sabor inigualable.